Después de su puesta de largo durante el pasado Salón de Ginebra, la variante más deportiva de popular Corsa está listo para recorrer las carreteras en su quinta generación.
Con casi
cuatro metros de longitud y como en el modelo anterior, que salió a la venta en
2012, estará disponible sólo con una carrocería de tres puertas. También
conserva de su predecesor el mismo motor de cuatro cilindros y 1,6 litros de
cilindrada sobrealimentado mediante turbocompresor, aunque se le ha realizado
una serie de cambios para aumentar su potencia hasta los 207 CV (antes 192 CV)
y un mejor par máximo, para ello se ha modificado la gestión electrónica, los
inyectores, el intercooler y el sistema de admisión. La caja de cambios es
manual de seis velocidades sin opción a una automática y la tracción es en las
ruedas delanteras.
Unos cambios que le sitúan al
modelo con opciones para competir en un nicho de mercado muy especial y con
modelos tan competitivos como los Ford Fiesta ST, Peugeot 208 GTi y Renault
Clio RS. Y como opción, la marca alemana ofrece un paquete denominado
"Performance" que incluye elementos más radicales como un diferencial autoblocante
de Drexler Motorsport, llantas de 18 pulgadas, neumáticos Michelin Pilot Super
Sport, amortiguadores Koni FSD y un sistema de frenos Brembo más potentes y
efectivos. A la venta en mayo, su precio es de 22.100 euros.
El miembro más rápido de la nueva
gama Corsa combina sin renunciar a nada, una deportividad extrema con una
impresionante adecuación a su uso diario. El coche de cerca de cuatro metros
impresiona por su motor, un 1.6 turbo con 207 CV, alto par motor, ágil
comportamiento y un aspecto de auténtico deportivo. También es el atleta de la
nueva familia de modelos pequeños de Opel.
Siguiendo la tradición de los
modelos OPC, el tope de gama de la familia Corsa se identifica inmediatamente
como un miembro de la familia de altas prestaciones de Opel. Además del nuevo
color de la carrocería Azul Ópalo, que es exclusivo del OPC, el Corsa también
equipa un nuevo frontal con entradas de aire más grandes y el distintivo capó
del OPC con una pequeña entrada de aire que le da una sensación visual de deportividad.
Y los faldones laterales dinámicamente formados con anchos pasos de ruedas que
crean la oportuna conexión con la parte trasera. Y es que atrás, el spoiler
sobre el portón trasero está disponible en dos versiones: uno de serie más
discreto y otro opcional mucho más llamativo, mientras que el escape doble es
firmado por Remus, con un difusor entre las salidas que le dan un nuevo toque
deportivo.
En el interior también se ha creado
un ambiente deportivo. Los baquets Recaro, muy llamativos, ofrecen al conductor
y al acompañante una perfecta sujeción incluso en la más exigente sucesión de
curvas. El volante forrado en cuero y achatado en la parte inferior, el pomo de
la palanca de cambios OPC y los pedales deportivos de aluminio, junto con los
característicos instrumentos del modelo, vienen de serie y completan el
interior. Además, los conductores tendrán disponible la conectividad de Opel.
Bajo el capó, el motor turbo de
gasolina con 207 CV del OPC es de nueva generación. El motor 1.6 litros entrega
un par máximo de 245 Nm entre las 1.900 y las 5.800 rpm y además cuenta con una
función overboost que aumenta esta cifra en 35 Nm más, llegando a los 280 Nm.
La potencia del motor OPC se traslada a las ruedas delanteras a través de una
caja de cambios manual de seis velocidades de recorridos cortos y precisos. Y
si hablamos de prestaciones, acelera de 0 a 100 km/h en sólo 6,8 segundos, casi
medio segundo menos que el Corsa OPC de la anterior generación. También al
adelantar ahora en quinta velocidad, el modelo necesita tres décimas menos que
el anterior y sólo necesita 6,4 segundos para recuperar de 80 a 120 km/h. La
velocidad máxima también se incrementa en 5 km/h y ahora llega hasta los 230
km/h. Pero pesar de estas cifras tan impresionantes y según el fabricante, el
consumo de combustible es de unos moderados 7,5 litros cada 100 kilómetros en
ciclo combinado, lo que equivale a unas emisiones de 174 gr de CO2 por km.
Por otro lado y con el fin de
trasladar la potencia al suelo de la mejor manera posible, los ingenieros de
Opel han trabajado conjuntamente con los especialistas en amortiguación de Koni
para desarrollar un chasis que ofrezca una innovadora amortiguación. La nueva
tecnología de Amortiguación de Frecuencia Selectiva (Frecuency Selective
Damping - FSD) permite que fuerzas de amortiguación se adapten a la frecuencia
del coche, permitiendo de esta forma el equilibrio entre una deportividad sin
compromisos y un adecuado nivel de confort. Y para aquellos conductores
experimentados, a los que les gusta llevar el coche hasta sus límites, pueden
desconectar completamente el control electrónico de estabilidad ESP con sólo
pulsar un botón. Además, la dirección de nuevo desarrollo reacciona de forma
más directa y precisa y ofrece a los conductores del OPC un tacto mucho más
deportivo.
También y para los conductores que
busquen un estilo aún más deportivo pueden optar por el paquete "Performance".
Este incluye un diferencial autoblocante delantero firmado por Drexler, llantas
de 18 pulgadas calzadas con neumáticos Michelin de más altas prestaciones y una
puesta a punto del chasis aún más deportiva. Además, los clientes que elijan el
paquete "Performance" contarán con un sistema de frenado Brembo de altas
prestaciones con discos delanteros de 330 mm de diámetro que ofrecen una óptima
capacidad de deceleración.