Viendo como ha jugado Inbee Park este torneo y, sobre todo esta última jornada es difícil creer que la coreana no haya jugado un torneo del LPGA Tour desde junio pasado y que su primera actuación haya sido el pasado mes de febrero. Pero después de la exhibición de hoy domingo con una vuelta de 64 golpes y ocho bajo par ha dejado muy claro que está de vuelta y que de nuevo va a luchar por un número uno del mundo que ya tuvo en su poder después de conseguir su decimo octava victoria en la LPGA.
La jugadora de 28 años, que ya ganó este torneo en 2015, luchó durante toda la temporada pasada con una lesión en el pulgar de su mano derecha hace un año y sólo volvió al campo de golf para ganar la medalla de oro en Río de Janeiro en los Juegos Olímpicos en agosto antes de dejar de jugar durante el resto de 2016.
Hace apenas unas semanas en su vuelta a los campos de golf Park terminó vigésimo quinta en su debut en el LPGA Tour en el LPGA de Honda de Tailandia antes de la victoria de este domingo. "Pensé que tardaría un par de meses en volver al Tour de forma regular y recuperar mi ritmo. Pensaba que estaría un poco oxidada", dijo Park. "Esta semana ha sido totalmente diferente. Especialmente la ronda final. Jugue como quería."
Tras la coreana, terminaron en la clasificación la tailandesa Ariya Jutanurgarn, con 18 abajo seguida de Sun Hyun Park con -16 y un grupo de tres jugadoras compuesto por Michelle Wie, Hana Jang y la canadiense Brooke Henderson con -14.
En cuanto a la representación española, Beatriz Recari terminó decimo quinta con diez bajo par y con una última tarjeta de 68 golpes mientras que Carlota Ciganda acabó vigésimo primera con -8 y Azahara Muñoz quincoagésimo quinta con +5.