En este caso, el problema no ha sido un mosquito o cualquier insecto que traslade o inocule enfermedades terribles, sino cuestión de seguridad. Hace una semana, a 80 kilómetros de donde se va a jugar el torneo, cayeron dos misiles y si, además, unimos la situación de Turquía y sus fronteras, la decisión del número dos del mundo no es extraña.
Como él, Tiger Woods también decidió no ir a Turquía, en su caso por razones de juego por considerar que no estaba preparado para volver a la competición, cosa que hará allá por el mes de diciembre en el Hero World Challenge organizado por su Fundación.
El circuito Europeo tendrá en esta primera prueba muchas ausencias de sus mejores jugadores, quizá demasiadas pero es lo que hay y lo que toca. Desde luego los dirigentes del Circuito Europeo se lo deben de hacer mirar ya que no es de recibo que en una de sus pruebas más importantes sus mejores jugadores no acudan.