De unas semanas a esta parte, sobre todo después de su espectacular victoria en el Open de España, el inglés Andrew Johnston se ha convertido, sin lugar a dudas, en uno de los jugadores más populares del golf mundial.
Y su fama no se debe sobre todo a su juego, sino más bien a su aspecto de hipster pasado de moda, a su barba poco arreglada, a su gran sonrisa y buen humor, su talla, casi desmedida para este juego, y a su pasión por los filetes, las carnes de todo tipo y su obsesión por dejar clara esa obsesión que le lleva, desde grabar en sus palos diferentes tipos de carne, hasta posar comiendo desmesuradas hamburguesas siempre que puede.
Parece que eso hace gracia a los aficionados, que le han tomado como, además de icono deportivo, como referencia gastronómica, algo que al parecer a él también le gusta.
Y es que tras su participación en el Open Championship el inglés está jugado también este último Major de la temporada en donde a estas alturas y a falta de que concluya la segunda jornada pasará el corte. Seguro que el bueno de "Beef" lo celebrará metiendose entre pecho y espalda un buen trozo de su carne favorita o un "hamburgueson" de récord.
Hoy, tras sus segundos 18 hoyos, ha terminado con un total de uno bajo par. Con el par firmado ayer no tendrá problemas en seguir hasta el fin de semana y seguir mejorando sus cifras y una temporada que para el inglés está siendo espectacular.
Vea la tarjeta de Andrew Johnston
Si (
No(
