Parece que el epitafio latino Requiescat in pace (descanse en paz) parece pensado ex profeso para describir el rendimiento de los Ferrari en el G. P. de Italia, en un circuito repleto de aficionados que solo salvan con su aplauso y su reconocimiento al piloto español.
En Monza, Lewis Hamilton consigue la victoria después perder posiciones en la salida y verse favorecido por los problemas de frenos de Rosberg, que terminó segundo. Felipe Massa, con el Williams, subió al podio junto a los pilotos de Mercedes, mientras que Fernando Alonso abandonaba por un problema mecánico en su Ferrari.
No hay mucho más que contar sobre el G.P. de Italia que, como cada año se disputaba en territorio Ferrari, en el espectacular trazado de Monza. El inglés suma su sexta victoria de la temporada tras una carrera nada cómoda en la fase inicial por problemas con el ERS que le descolgaron a la cuarta posición y tardó una decena de vueltas en desembarazarse de los Williams, y de Hulkemberg, para irse a la caza de Rosberg que se "comió" literalmente la frenada de final de recta en dos ocasiones.
Lo que los algunos señalaban como errores de frenada de Rosberg, propios de pilotos principiantes, al parecer, como viene siendo habitual, ven otra carrera distinta a la que se muestra en las imágenes. Rosberg se marchaba claramente por delante de Hamilton hasta que surgieron los mencionados problemas de frenos... "Sin que fuera presionado en ningún momento por el británico"...a partir de ese momento Hamilton comenzó a abrir hueco con Rosberg, que amarró la segunda posición y un buen número de puntos de cara al campeonato.
El brasileño, Felipe Massa, que en Monza fue confirmado como piloto de Williams para la próxima temporada, hizo valer la velocidad punta de su monoplaza y aprovechar el error de su compañero Valteri Bottas en la salida para subirse al podio por primera vez en la temporada. Cuarto fue Bottas, por delante de los Red Bull de Ricciardo y Vettel, con Sergio Pérez a continuación, Button, Raikkonen y Magnussen para completar los diez primeros.
El asunto Ferrari empieza ser preocupante. Es evidente que no están invitados al festín de los Mercedes, pero tampoco pueden con los Williams, ni con los red Bull, ni con equipos muy inferiores que han perdido el respeto a Ferrari. En esta ocasión fue un problema mecánico el que dejó tirado al español perdiendo la cuarta posición en el mundial de pilotos en favor de Bottas.
Alonso se mostró contrariado por su abandono, sobre todo por hacerlo delante de los tifosi de Ferrari: "Me molesta por los 'tifossi', nosotros no es que tengamos expectativas altas pero cuando llegas a Italia y ves a todo el mundo apoyando esperas hacer una buena carrera y hacerlo bien por ellos. Me tocó abandonar y es una pena por ellos".
Continua Alonso hablando de su abandono: "Creo que tuvimos un problema con el sistema ERS, que perdió temperatura o agua, o algo así, según me explicaron, por encima. Y dejó de funcionar. "Había que apagar el coche porque si no, rompíamos los dos motores" comentaba al bajarse del coche.
Mas desesperantes nos parecen otras declaraciones del asturiano: "El coche iba bien y después de salir detrás del tráfico decidimos levantar el pie y reservar neumático para las últimas diez vueltas, no sé cómo hubiese acabado pero teníamos el peor tiempo del grupo" o peor aun "este año, que no luchamos por cosas importantes". Palabras que esconden una tremenda resignación ante la falta de competitividad de los coches rojos.