No ha sido una buena semana para Rafa Cabrera Bello a pesar de que el sábado por la mañana, cuando acabó su segunda vuelta en esta edición del Masters de Augusta embocando ese putt de metro y medio olo hacía para seguir jugando el fin de semana.
El mísmo ha dicho que no está jugando bien, que sus sensaciones no son buenas y como es lógico sus resultados tampoco. En esta edición del torneo de la Chaqueta Verde hemos visto a un Rafa Cabrera Bello al que le faltaba ese toque de calidad extra que siempre le ha caracterizado. No ha estado brillante con el juego desde el tee, tampoco muy bien con los hierros y regular con el putt. Sólo su enorme calidad le ha llevado a pasar el corte y a terminar este Masters con el espíritu de mejora y con las ganas de meterse en el próximo que si Dios quiere se jugará en este mismo campo en el mes de abril de 2021.
Pero para estar allí Rafa deberá de mejorar muchos su juego y sus resultados las próximas semanas. Quizá hacer borrón y cuenta nueva y empezar otra vez, casi desde cero, a seguir cumpliendo sus sueños tanto en el PGA Tour como en el European Tour.
Este domingo el canario terminó con un total de +2 acabando al par del campo con tres birdies, un eagle en el 15 y cinco bogeys que dejan cierta sensación de irregularidad en una última vuelta en la que terminó con 72 golpes después de las tres primeras en las que selló tarjetas de 73, 71 y 74 golpes.
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