Álvaro Quirós vuelve a la senda de los ganadores. Han tenido que pasar casi seis años, desde el triunfo en Dubai de 2011, para que el de Guadiaro pueda de nuevo levantar un trofeo del Tour Europeo, el séptimo de su carrera que le saca del túnel de estos últimos años y le devuelve la tarjeta. No experimentaba el liderato desde el Nordea Masters de 2014, y en esta ocasión aunque parecía que lo tenía fácil se le ha complicado al final y ha tenido que sufrir más de la cuenta.
La jornada parecía plácida en los primeros nueve hoyos. Álvaro Quirós partía con cinco golpes de ventaja y en la primera vuelta con cuatro birdies y un birdie por los cinco birdies y un bogey de Zamber Lombard le daban al español una renta de cuatro golpes.
Sin embargo, la segunda vuelta se complicó más de la cuenta. Bogey al 10 y aunque el sudafricano firmó bogey al 11, dos birdies en el 12 y 13 le daban opciones. En el 15 ambos hicieron bogey, pero en el 16 Quirós pinchó con doble bogey y se comió toda su ventaja. En el 17 ambos firmaron bogey, y en el 18, tras fallar el aproach los dos, Quirós tuvo que salir de bunker y se dejó un putt muy tenso mientras que Lombard la dejó dada. En la presión el de Guadiaro se creció y pudo forzar el desempate.
En el primer hoyo de play off de nuevo los dos jugadores fallaron en la entrada en green. Esta vez tanto Lombard como Quirós patearon cómodamente para par. Segundo hoyo de play off y los nervios se dejaban notar con las dos bolas en el rough. Consiguieron entrar en green pero lejos del hoyo. Lombard tuvo que hacer tres putts mientras que Álvaro Quirós con dos putts pudo llevarse un triunfo que ha peleado desde el principio.
Entre los demás españoles, Pep Anglés ha logrado un valioso cuarto puesto después de una ronda de 69 golpes para abcabar con -12 tras un inoportuno bogey en el 18.
El golf sigue llamando a la puerta, por Josega Fernández
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