El australiano Jones sabía que para tener una miníma opción de ganar el torneo tenía que hacer birdie en el 18 pero tras un buen driver su segundo golpe a green dejó bastante que desear y de hecho casi se fue al agua por la parte izquierda. Su bola reposaba casi en el corte del antegreen y desde ahí, con un putt de casi 20 metros, embocó para hacer el soñado birdie y terminar su torneo con una vuelta de 65 golpes y 15 bajo par.
Sólo le faltaba esperar en Casa Club para ver si el super fiable Matt Kuchar hacia bogey en el 18 y si Sergio García no hacía un birdie y forzaba un Play-off con el norteamericano. Al 17 llegaron Kuchar con -16 y Sergio con -14. Para dar la vuelta al torneo el castellonense, que había jugado muy bien durante la cuarta jornada, necesitaba un birdie más en el 18 y que Kuchar fallara. Si esto pasaba a la fiesta se uniría el australiano que esperaba nervioso en Casa Club soñando con su primera victoria en la PGA y con su posible viaje al Masters de Augusta para ser el séptimo australiano en jugar en el torneo de Bobby Jones.
García salió con la madera tres para coger calle pero su bola salió directa hacia la derecha al búnker y, además, su bola terminó muy mal colocada forzándole a dejar su bola un poco más adelante sin posibilidad de par, terminando con bogey y diciéndole adiós al torneo aunque terminando con una excelente tercera plaza que, quizá, nos sabe a poco, sobre todo después de las dos excelentes primeras vueltas que jugó.
Por su parte, Kuchar que dejó su bola en medio de la calle con un espectacular driver, no estuvo tan acertado con el híbrido en su segundo golpe y con un hook a la izquierda mandaba su bola al agua para terminar con un bogey que le dejaba con -15 y empatado con un Matt Jones que no se creía lo que estaba viendo.
Pero las cosas increibles no habían terminado todavía. En su tercer golpe en el primer hoyo de desempate, Jones, que había dejado su bola a unos cuarenta metros de la bandera, en la parte derecha de la calle, casi pegado al bunker, pegó con su hierro y el approach salió de maravilla, tan bien que empezó a rodar hacia el agujero para terminar embocándo, ganando el torneo y abriendo su puerta hacia el Masters de Augusta para convertirse casi a última hora en el séptimo australiano qe tomará parte en el primer major de la temporada junto a Jason Day, Marc Leishman, Adam Scott, John Senden, Steven Bowdich y Oliver Gross.