Pequeños motores turbo V6 de 1.600 cc. de cilindrada. Modificaciones aerodinámicas que han cambiado radicalmente la imagen de muchos monoplazas, consumos, sistemas de puntuación... casi todo es nuevo para esta temporada que comienza la próxima semana en busca de mayor emoción en los Grandes Premios.
Se terminó la cuenta atrás y los equipos están llegando a Melbourne para la primera cita del año. Pocos días para levantar el telón de esta nueva Fórmula 1 con un nubarrón cargado de incertidumbre planeando sobre todos los equipos. Nubarrón que tiene nombre, fiabilidad sobre el comportamiento de los nuevos motores de 6 cilindros turboalimentados, y apellido, en este caso el más ilustre de todos, el del equipo ganador de las últimas temporadas, Red Bull.
Los coches del maestro Newey no han funcionado. Es más, han sido los peores durante la pretemporada. Se fueron de los test de Jerez sin haber completado una sola vuelta. En Bahréin apenas pudieron rodar asolados por multitud de problemas y sin tiempo de reacción para corregir las deficiencias de sus propulsores Renault.
Esta situación plantea otra de las grandes incógnitas de principio de año, ¿Será Vettel capaz de mantener el nivel de temporadas anteriores sin disponer del mejor coche de la parrilla?. No tardaremos en averiguarlo, nuestra apuesta es que no. A coches iguales le situaríamos por detrás de Alonso, de Hamilton, de Rosberg, de kimi Raikonnen etc., aun a pesar de su palmarés adornado por 4 títulos.
La otra, y más interesante para nosotros, es el comportamiento de Ferrari. No han estado rodando en tiempos de cabeza, en el mejor de los casos a más de un segundo de Mercedes, pero manteniendo un consumo muy reducido y sin apenas problemas de refrigeración. En cuanto a los pilotos de la escudería del Cavallino Rampante es sin duda el mejor tándem de la parrilla.
Los que se presentan como favoritos para esta primera cita son los monoplazas equipados con motores Mercedes. Llevan más tiempo desarrollando las mecánicas y sus cronos avalan sin discusión su calidad de primer favorito. Dos huesos muy duros al volante. Tanto Hamilton, con mucha experiencia acumulada, como Rosberg y su punto de bravura controlada, configuran uno de los equipos más consistentes que podemos encontrar en la parrilla. Pueden ser imbatibles en las primeras carreras del año.
McLaren solamente puede mejorar su desastrosa actuación de la pasada temporada y suma a su mecánica Mercedes la incógnita del nuevo fichaje, Magnussen, y la veteranía y buen hacer del "Caballero" Jenson Button. No podemos olvidar a Lotus, que incorpora al venezolano Pastor Maldonado y mantiene al suizo Grosjean. Podríamos definirlos con una sola palabra "peligro", sin equivocarnos. Dejémoslo en posible sorpresa.
Imposible hacer quinielas sobre el comportamiento del resto de equipos que deberían colocarse, mas o menos, por este orden: Toro Rosso, Force India, Sauber, Marussia y Catherham. Dejamos para el final a Williams, con un duro trabajo por delante para recuperar el prestigio de otros tiempos. Tienen una mano segura para conseguirlo con el fichaje de Felipe Massa. De momento se han vestido a la última moda racing recuperando los colores de Martini.