Desde su presentación en Shanghái en abril de 2015, Peugeot Sport ha seguido trabajando en el desarrollo de la cadena de tracción, en la que se combinan un motor de gasolina con dos propulsores eléctricos. Y gracias a los últimos avances, los 500 CV y los 730 Nm de par están disponibles en tres modos de conducción (ZEV, HYbrid y HYbrid Sport) y en una estrategia de Launch Control, supervisados por el conductor a través del Peugeot i Cockpit.
El Peugeot 308 R HYbrid presenta unas proporciones ideales en su búsqueda de las prestaciones puras: compacidad notable, voladizos cortos y equilibrio perfecto. Para lograr este objetivo, tiene la ventaja de estar basada en la berlina 308 y su plataforma EMP2. Perfectamente identificables, la elegancia y la deportividad del 308 se han combinado con los códigos de diseño explorados por el concept Quartz para lograr una expresión radical. Y para pegarlo al suelo, cuenta con neumáticos 235/35 R19, montados en vías ensanchadas de 80 mm, que parece devorar el asfalto con su impresionante frontal, coronado con un capó con unas expresivas tomas de aire y un paragolpes mineral con aristas vivas y planos lisos.
Con su rejilla ajedrezada, la parrilla proporciona aire fresco al innovador sistema de propulsión híbrido que desarrolla 500 CV. Las salidas de aire laterales incorporan intermitentes secuenciales de LED, mientras que la toma central exhibe la firma del coche, un distintivo con la denominación 308 R HYbrid grabada. También, las líneas cinceladas lo más cerca posible de la mecánica, captan la luz y guían a la vista en el descubrimiento del resto del vehículo. El Peugeot 308 R HYbrid se viste de un azul particularmente intenso mediante la integración de pigmentos fluorescentes y partículas de cristal. Este color evoca, al mismo tiempo, el sistema híbrido y el tono históricamente reservado a los coches de competición franceses. Y este azul se combina, a la altura de las puertas traseras, con un negro mate en una nueva expresión del corte limpio, la “coupe franche”, signo de identidad de los modelos Peugeot más extremos.
En la zaga, el nuevo modelo expresa su radicalidad con una notable sobriedad. La trasera es un anticipo del comportamiento en carretera del coche mientras que el pequeño alerón en la parte superior del portón culmina el trabajo aerodinámico. Unos toques de blanco cerámico en los embellecedores de las tomas de aire y las taloneras ponen de relieve el dinamismo del coche.
El interior, al abrir las puertas se descubre un habitáculo impresionante, estructurado por una consola central que atraviesa el interior longitudinalmente y que configura el espacio para cuatro asientos de tipo baquet. Y los materiales y los colores utilizados confirman de manera distintiva el objetivo del 308 R HYbrid: las prestaciones. Así, los acabados de la parte superior del habitáculo y del techo son de color antracita. Los asientos baquet están tapizados en un cuero beige. Y en la más pura tradición de la los automóviles deportivos, los toques de rojo se reparten por el interior, especialmente en el marco de los instrumentos principales, la referencia para el centrado del volante y la consola central.
También, por primera vez, el 308 R HYbrid adopta, en un coche basado en un vehículo de serie, materiales hasta la fecha sólo empleados en concept cars. Así, el salpicadero está forrado con un material textil obtenido mediante una técnica de tejido digital. Este procedimiento, muy innovador, permite tapizar piezas complejas de gran tamaño y darles un tacto blando sin necesidad de recurrir a espumas y sin aumentar el peso de los distintos componentes.
Gracias a la innovadora arquitectura del Peugeot i-Cockpit, el conductor controla con naturalidad los 500 CV que desarrolla la mecánica. Para ello, se han puesto tres mandos a su disposición. En la consola central, dos botones le permiten supervisar la cadena de tracción. El primero pone en marcha el potente sistema de propulsión del vehículo, mientras que el segundo activa la transición del modo Hybrid al ZEV (100% eléctrico).
El volante dynamico, forrado en cuero perforado y adornado con el logo 308 R Hybrid, permite tomar las curvas de un modo preciso e incisivo. Y con el pulgar derecho, puede pasar al modo Hybrid Sport, pulsando sobre un botón en el volante. Muy cerca del volante, las levas para el cambio de marchas permiten gestionar la caja de seis velocidades con las yemas de los dedos.
La instrumentación elevada, por su parte, proporciona todas las informaciones necesarias sin necesidad de apartar la vista de la carretera. La consola central proporciona todos los datos sobre la cadena de tracción: marcha engranda, modo activado, nivel de carga y estado instantáneo (aportación de potencia o recarga) de la batería. Asimismo, el indicador de cambio de velocidad permite exprimir al máximo la mecánica de este vehículo, indicando el momento ideal para pasar a la marcha superior. Para ello, cuando está a punto de activarse el interruptor, muestra sus datos en rojo y suena una alarma.
El desarrollo del Peugeot 308 R HYbrid se ha confiado a Peugeot Sport. Se trataba de todo un desafío: desarrollar un sistema de propulsión híbrido de gasolina plug-in de elevadísimas prestaciones, integrarlo en la plataforma EMP2 y llevar su rendimiento a nuevos horizontes. El resultado está a la altura del reto: impresionante. Con una potencia de 500 CV y cuatro ruedas motrices, el 308 R HYbrid alcanza 250 km/h, velocidad limitada electrónicamente, realiza el 0 a 100 km/h en apenas 4,0 segundos y cubre los 1.000 metros en salida parada en sólo 22 segundos.
También esta perfectamente equilibrado, con un reparto del peso del 60% en la parte delantera y un 40% en la trasera, para un temperamento fogoso, con una relación peso/potencia de apenas 3,1 kg/CV. Y de manera sistemática, Peugeot Sport utiliza su experiencia técnica y su palmarés en competición para determinar las características de los componentes y su emplazamiento ideal. De este modo, el sistema de propulsión de este modelo incluye tres fuentes de potencia: El motor cuatro cilindros de gasolina 1.6 THP 270 S&S, la mecánica de serie con la mayor potencia específica del mundo en este nivel de cilindrada, con 169 CV/l. Un motor eléctrico, con una potencia de 85 kW / 115 CV, acoplado a las ruedas delanteras a través de la caja de cambios de seis velocidades. Y un segundo motor eléctrico, con las mismas características, situado sobre el tren trasero.
Al arrancar, el 308 R HYbrid activa automáticamente el modo ZEV, que recurre al motor eléctrico trasero para propulsar el vehículo. Con sus 115 CV, el modo ZEV permanece en funcionamiento hasta que se alcanzan los 100 Km/h. Si la batería tiene un nivel de carga insuficiente, el 308 R Hybrid pasa, de una forma totalmente autónoma, al modo HYbrid. El conductor también puede pasar a esta modalidad de funcionamiento pulsando el mando situado en la consola central.
En modo HYbrid, la potencia y el par que se transmiten a las ruedas alcanzan unos máximos de 270 CV y 330 Nm, respectivamente. El motor gasolina es la mecánica principal del 308 R Hybrid. La unidad eléctrica delantera interviene en tres fases. En aceleraciones a bajo régimen, compensa el tiempo de respuesta del turbo. Cuando se cambia de marcha, sustituye al motor térmico para asegurar un par constante. Además, también puede recargar la batería. Para ello, el motor gasolina desarrolla una potencia superior a la demandada por el conductor. La potencia extra se traslada hacia la batería. Cuando se funciona en este modo, una batería totalmente descargada requiere menos de 15 Km para volver a su plena capacidad, aumentando la disponibilidad del último modo, el Hybrid Sport, accesible desde un botón situado en la parte derecha del volante. Al pisar fuertemente el pedal del acelerador, los motores eléctricos actúan como un boost y se asocian al motor gasolina para desarrollar hasta 400 CV y 530 Nm. De esta forma, el 308 R HYbrid presenta aceleraciones desconocidas, hasta ahora, en un modelo dynamico.
En el eje delantero, el motor eléctrico aporta 15 CV adicionales en el tren delantero y, además, interviene de la misma manera que en el modo HYbrid. En la zaga, la potencia del motor eléctrico decrece a media que aumenta la velocidad, optimizando la disponibilidad del modo HYbrid Sport, al requerir menos energía de la batería.
Además de estos tres modos, el 308 R Hybrid dispone de una estrategia de Launch Control, pensada para lograr las mejores salidas desde parado. Los 500 CV y 730 Nm del sistema de propulsión se gestionan automáticamente. Para ello y en parado, el conductor pone en marcha el modo HYbrid Sport, desconecta el ESP, pisa el freno, engrana la segunda velocidad y acelera a fondo, con el motor gasolina regulándose automáticamente a 4000 rpm. En ese momento, basta soltar el pedal del freno para poner el cronómetro en marcha y asaltar los 1000 m en salida desde parado.