Ni estaba ni se le esperaba. Al menos, en las apuestas para hoy no se contaba con el norirlandés Jonathan Caldwell, y quizás por eso ha tenido la suficiente tranquilidad como para terminar con su mejor resultado de la semana y de paso adjudicarse su primer título en el European Tour.
La victoria de Caldwell en el Scandinavian Mixed llegaba con la discreción del que parte desde atrás, pero que a lo largo de la ronda fue recorriendo el campo a base de descontar golpes y escalar posiciones hasta llegar al hoyo 14 con ocho golpes a su favor, incluido el eagle que firmaba en ese mismo hoyo.
El resto de la vuelta, los cuatro hoyos que le quedaban por transitar, se parecieron mucho a los de días anteriores. No faltó el birdie del 16, el cuarto de la semana, ni tampoco los bogeys que le dejaban con esas últimas restas inhábiles.
Tras él, con la decepción que deja quedarse a un suspiro de la victoria, pero con la satisfacción del trabajo bien hecho, Adrián Otaegui completaba el torneo en segunda posición. El guipuzcoano se fue librando de los bogeys hasta que en el hoyo 18 aparecía el único error de la jornada que era, además, el que le quitaba la última opción de ganar al impedirle forzar el desempate.
Antes de eso Otaegui había restado seis birdies, tres en cada mitad del campo. Ganando un puesto y convirtiéndose con mucho en el mejor de los españoles.
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