Desde el comienzo de esta temporada, y tras la segunda plaza que Jon Rahm logró en el torneo de los campeones jugado en Hawai, las opciones de que el de Barrika pudiera optar al número uno del mundo crecieron. Y siguieron mejorando cuando alcanzaó la tercera plaza y cuando tras su victoria en el CareerBuilder Challenge subió a la segunda plaza tras Dustin Johnson.
Tras haber coronado esa segunda posición mundial, cada aficionado español se hace la misma pregunta el jueves, antes de que empiece el torneo en el que Jon va a jugar. ¿Puede ser número uno esta semana?
Y la respuesta era que sí en el Farmers Insurance Open en el caso de que Rahm ganara y no en el caso del Pohenix Open, por que esa semana y tras no haber terminado Jon entre los 12 primeros en el Farmers ya no podía optar a quitarle el título a Johnson en Arizona.
Pero esta semana, de nuevo con Rahm en juego y también con Dustin Johnson, el escenario para que Rahm sea número uno del mundo vuelve a ser posible, aunque la cosa está complicada para el español ya que tendría que ganar en Pebble Beach y que el número 1 del mundo terminara más allá del puesto 45 de la clasificación.
Una posición que, hoy por hoy, parece bastante improbable pero que si repasamos los últimos cinco años de Johnson veremos que no es tan imposible de que se pueda llevar a cabo.
En los últimos cinco años, Johnson ha jugado siempre este AT&T pero con diferentes resultados: el año pasado terminó 14º, en 2017, tercero, en 2016, cuadragésimo primero, en 2015, cuarto, en 2014, segundo y en 2013 falló el corte, un poco de todo.
Si buscamos en esos cinco años resultados peores que una cuadragésimo quinta plaza también encontraremos bastantes. En 2017 quedó quincogésimo cuarto en el Open Championship, en 2015 acabó sexagésimo noveno en el The Players, cuadragésimo noveno en el Open Británico y quincoagésimo tercero en el Bridgestone; en 2014 firmó dos muy malos torneos en el The Players, donde terminó quincoagésimo noveno y en el Memorial donde finalizó cuadragésimo sexto.
En 2013 también tuvo malas actuaciones terminando sexagésimo segundo en el BMW Championship, quincoagésimo quinto en el US Open, quincoagésimo primero en el Farmers Insurance Open y cuadragésimo sexto en el Honda Classic. Así que opciones hay de que el actual núemro uno del mundo no firme cuatro buenas vueltas. En ese caso habrá que esperar a que Rahm haga su trabajo y gane. Sólo así veremos esta semana al de Barrika sucediendo a Seve Ballesteros en el palmarés mundial de golfistas profesionales.