El estadounidense Jordan Spieth, que hoy terminó con una gran vuelta de 67 golpes, cinco bajo par con birdie en el 18 incluído, lidera en solitario la clasificación de esta 146 edición del Open Championship que parece que tiene dueño aunque hasta que no termine el torneo Spieth, lógicamente, no podrá levantar una Jarra de Clarete que tras la "Jornada del Movimiento" parece que ya lleva escrito su nombre.
Hoy el texano dió un paso de gigante par conseguir su tercera victoria de la temporada tras el Travellers Championship y el AT&T de Pebble Beach -ambos torneos del PGA Tour- y lograr su tercer Major tras los conseguidos en 2015, el Masters de Augusta y el US Open que le llevaron al número 1 del mundo en aquella temporada, firmando una tarjeta de 67 golpes en la que hizo tres birdies en los nueve primeros hoyos y dos más en los nueve segundos para colocar su marcador con doble dígito -el único del torneo- y aventajar en tres golpes al que será de nuevo su compañero en el partido estelar mañana, Matt Kuchar, que en ningún momento pudo dar alcance a un Spieth que mostró de nuevo su mejor versión, muy seguro desde el tee de salida, notable con los hierros desde calle y sobresaliente con el putt, una vez más su mejor arma hoy en los greenes, todavía algo lentos de Royal Birkdale.
Y es que Kuchar lo intentó, pero no pudo. El gigantón de la sonrisa perenne firmó cuatro birdies y un bogey en el cuatro, en la primera parte del recorrido pero en los nueve segundos hoyos, y tras el empuje de Spieth, reaccionó con tres birdies más y un doble bogey en el 16 que truncó todas sus posibilidades de dar caza al lider.
Tras ellos dos -que parecen los principales candidatos a la victoria- se situaron erl canadiense Austin Connelly -una de las revelaciones del torneo, y el también estadounidense Brooks Koepka -ganador este año del Us Open- y que intentará con todas sus fuerzas hacer el doblete en este Open Championship que parece que tendrá dueño americano a no ser que el sudafricano Brendan Grace, que hoy firmó el récord del campo y el del resultado más bajo en un Major -por supuesto incluido el Open Championship- vuelva a repetir el majestuoso 62 con el que hoy, seguro, sueña cuando concilie el sueño.
Empatado con Grace se sitúa el japones Hideki Matsuyama y tras ellos el número uno del mundo que con -3 sueña con ganar en Birkdale lo mismo que un grupo de hasta cuatro jugadores con la misma puntuación pueden creer en el milagro de recuperarle a Spieth hasta ocho golpes para levantar la Jarra de Clarete. Entre ellos el canario Rafa Cabrera bello, el mejor de los nuestros que está a dos golpes del Top-3 y que intentará este domingo viniendo desde atrás recuperar posiciones, quedar lo más arriba posible y si se da la opción jugar sus cartas para acercarse al título.
Rahm y García, los otros dos españoles que pasaron el corte, siguieron sin conectar cion el campo y el torneo y tras terminar con dos vueltas de 70 y 68 golpes, respectivamamente ocupan el puesto cuadragésimo tercero y decimo octavo buscando mañana mejorar posiciones en este tercer major de la temporada.