Con dos excelentes vueltas de tres bajo par en un día muy complicado marcado por la lluvia y el viento, Pablo Larrazábal y Adrián Otaegui han terminado a cuatro golpes de la cabeza tras la primera jornada del Open de Francia que se lleva a acbo en el Golf National de Paris.
Los españoles terminaron con una tarjeta de 69 golpes, a cuatro del líder en solitario del torneo, el inglés Paul Waring, que terminó con un espectacular -7 basado en una tarjeta en la que firmó siete birdies y ningún error aventajando a su compatriota Natahm Kimsey, al belga Nicholas Colsaerts -uno de los grandes favoritos al triunfo- y al sueco Alexander Björk en dos golpes con ese reducido grupo empatado con -5.
Con cuatro abajo terminaron el inglés y número dos de la Race to Dubai, Tommy Fleetwood y el estadounidense Peter Uihlein y ya con menos tres los dos espñoles que conforman un grupo de nueve jugadores entre los que también se encuentran entre otros George Coetze y Andy Sullivan.
El resto de los jugadores españoles en el torneo no han terminado tan bien como Larrazábal y Otaegui. Jon Rahm acabó trigésimo segundo con uno bajo par en su debut en el Tour Europeo. Ya por encima del par acabaron Nacho Elvira y Alejandro Cañizares y Pep Anglés, con +1. Carlos Pigem y José María Olazábal no pudieron mejorar el +2, mientras que Quirós, Campillo y de la Riva terminaron con +3. Unos resultados que les obligarán mañana a firmar muy buenas vueltas si quieren pasar un corte muy exigente y complicado en un campo muy dificil que ya empieza a mostrar claramente lo duro que será para americanos y europeos en la edición de 2018 de la Ryder Cup.
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