Si las chicas necesitaron el domingo seis hoyos para dirimir quien se llevaría la victoria esta semana en la LPGA, los chicos necesitaron cuatro para saber quien se llevaría el gato al agua y la victoria en este Zurich Classic retrasado hasta el lunes debido a la falta de luz para saber quien conseguría la victoria final.
A las nueve de la mañana hora estadounidense los cuatro protagonistas, Blixt y Smith por un lado y Kisner y Brown por otro, se disponían a salir a jugarse el todo por el todo en un hoyo que apenas unas horas antes había vivido la emoción de un approach mágicio en el que Kisner dio, seguramente el golope de su vida.
Esta vez no hubo tanta emoción y el Play-off se alargo hasta cuatro intentonas después de que por dos veces consecutivas los cuatro jugadores terminaran al par en el 18 y terminaran también el hoyo 9 -un exigente par tres- de nuevo con el par.
De vuelta al 18 esta vez Cameron Smith no perdona. Tras tener dos oportunidades en el primer y segundo hoyo de desempate no desaprovechó la tercera y con un birdie casi dado sentenció el torneo consiguiendo su primera victorias y abriendo unas puertas tanto para él como para Blixt aún más importantes para ambos en el PGA Tour.