Con un absoluto dominio del torneo que le a llevado a ganar liderando de principio a fin, Nate Lashley acaba de inaugurar su palmarés en el PGA Tour tras ganar la prueba inaugural del Rocket Mortgage Classic. Un torneo que, al parecer, no presentó dificultades para él.
No fue hasta esta última jornada, probablemente castigado por los nervios lógicos al enfrentarse a su primer título en el mejor circuito del mundo, que Lashley ha alcanzado la cifra de 70 golpes y aun así, ninguna de sus cuatro tarjetas han llegado al par del campo.
Con un octavo puesto en Puerto Rico como mejor resultado, y cuatro cortes fallados esta temporada, entre los que se incluye el Corales Resort Punta Cana, torneo que ganó en 2017 cuando pertenecía al Korn Ferry Tour, Lashley no era precisamente un jugador por el que apostar en un torneo con nombres como Sabbatini, Snedeker o Reed sobre el recorrido de Detroit.
Sin embargo, el de Nebraska supo encontrar su lugar desde el primer momento y no apearse de su condición de líder en cuatro días para cerrar el torneo con -25, un guarismo que le facilitaba seis golpes de distancia sobre el segundo clasificado, el también estadounidense Doc Redman, un jugador al que hay que tener muy encuenta. A sus 21 años, ganó el U.S. Open Amateur en 2017 y en ese mismo año se adjudicó la Walker Cup. Esta semana accedió gracias a la clasificatoria del lunes y terminó con un total de -19.
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