A una vuelta para que termine la segunda prueba de los Play-Offs de la FedEx Cup, el escocés Russell Knox, número 20 del Ranking Mundial y séptimo en la clasificación de la FedEx, todavía se preguntaba porque no iba a estar en la Ryder Cup.
La razón es bien sencilla: el escocés/norteamericano -tiene doble nacionalidad- sólo ha jugado esta temporada cuatro torneos del Tour Europeo y Clarke, que era el único que podía elegirle al no ser miembro del European Tour, prefirió a Westwood -que jugó diez torneos este año en Europa-, Kaymer -que disputó siete- y Pieters -que jugó cinco-.
“Ha sido difícil encajar mí no presencia en la Ryder Cup", dijo el viernes después de su primera vuelta en el Deutsche Bank. "Obviamente, quedé muy decepcionado al recibir la llamada de Darren Clarke diciéndome que no estaba en el equipo pero tengo que respetar el proceso de toma de decisiones de Darren y su equipo”.
Knox, que ha ganado dos torneos este año y que ha quedado segundo en otros dos, ocupa antes del Deutsche Bank la séptima plaza en el Ranking de la FedEx Cup y la vigésima plaza en el Ranking Mundial con unas ganancias de 4,8 millones de dólares siendo el europeo que más se ha embolsado este año en premios en los mejores circuitos profesionales.
"Si yo fuera Russell Knox me sentiría muy mal después de hacer un gran año", dijo McIlroy refiriéndose a su no inclusión en el equipo.
Sin embargo Knox, que tiene la doble nacionalidad, podría jugar todavía esta Ryder Cup si Davis Love III le eligiera. No en vano el escocés de nacimiento ha vivido en los Estados Unidos desde que estudiaba en la Universidad de Jacksonville y, además, su padre es estadounidense.
“Sé que algunas personas han estado hablando de esa posibilidad y de que Davis Love III pueda llamarme. Es cierto que soy un ciudadano de EE.UU., pero no creo que eso vaya a suceder”, dijo.