“La temporada estaba siendo bastante frustrante, no me encontraba cómodo y no acababan de salir las cosas; sin embargo, esta semana, casi sin darme cuenta, de repente ha cambiado la situación y termino ganando el torneo. Todavía no me lo puedo creer, estoy soñando.
“Han tenido que pasar seis años para volver a ganar, la victoria se ha hecho esperar demasiado y tal vez por esa razón haya sido mucho más especial. Han sido seis años duros durante los que no he tirado la toalla y me he matado a trabajar, pero confío en que a partir de ahora empiece a ver los resultados.
“Hoy he jugado muy bien, ¡todavía no sé cómo! Hacer 62 golpes ha sido increíble, el vueltón de mi vida. He jugado con Mark Tullo y Jordan Smith y no daban crédito a los putts que iba metiendo, algunos larguísimos, parecía que entraba todo y sólo empecé a sentir un poco de presión hacia el final de la vuelta. ¡Estoy feliz!”.