En sus orígenes, el torneo se disputaba en la modalidad match-play o por hoyos, es decir, cada hoyo lo ganaba el jugador que embocaba en el menor número de golpes, y resultaba vencedor el jugador que ganara más hoyos. A partir de 1958, se comenzó a disputar en la modalidad de Stroke-Play o por golpes, es decir, vencía el jugador que realizaba el recorrido en menor número de golpes. El primer ganador del torneo fue Jim Barnes, que recibió un premio de 500 dólares.
Este año, en su nonagésimo octava edición el ganador se hará con un talón de 1,8 millones de dólares de los 10 millones de la bolsa general de este cuarto Major de la temporada que en esta ocasión adelanta en unas semanas su fecha de disputa obligado por los Juegos Olímpicos y por su celebración en el mes de agosto de las competiciones masculina y femenina de golf 112 años después de la incursión de este deporte en el programa olímpico.
Ya hemos hablado en estas mismas páginas de favoritos, candidatos y outsiders pero la realidad es que todos o casi todos miran el palmarés de ganadores de torneos del Grand Slam para saber si alguno de los tres que ya han sumado victoria este año -Willet en el Masters, Jonson en el Us Open, y Stenson en el Open Championship- serán capaces de conseguir el más difícil todavía y sumar otro Major este año.
Los tres lo tienen complicado, es verdad, pero tan cierto es que los tres -quizá Willet en menor medida- parten como grandes favoritos a la victoria. Su palmarés en este 2016 así lo atestigua y aunque el sentido común nos doce que Stenson es el que más “calentito” está, no hay que desdeñar a Johnson que ha demostrado que sigue jugando muy bien desde su gran victoria.
A Willet la Chaqueta le ha sentado muy bien, pero desde el torneo de Augusta no ha tenido similares actuaciones y su juego no ha caminado por el mismo rasero que en el campo de Bobby Jones.
En las dos primeras jornadas de este PGA Championship los tres conformarán el partido estelar y los tres se mirarán de reojo. Ellos, como los demás, saben que este tipo de torneos no se ganan en la primera jornada, pero sí que se pueden perder en los primeros 18 hoyos y los tres quieren seguir soñando con el doblete.