Después del descanso de la semana pasada, Rory McIlroy salta al escenario de la final de Dubai con la intención de alcanzar su tercera Race to Dubai. El norirlandés se ha mostrado confiado con su juego y con su ventaja. "Siento que estoy jugando lo suficientemente bien para ganar", dice, e insiste en que "sólo tengo que preocuparme de lo haga yo. Si gano me llevo la Race to Dubai".
Ganador de dos Race to Dubai, campeón en el Dubai Desert Classic de principio de año en un prueba donde precisamente se estrenó como profesional hace seis años le motiva, y no se esconde al reconocer que "sería una decepción no ganar la Race to Dubai".
Por su parte, el inglés Danny Willet, que ha estado entre los dos primeros todo el año tras ganar el Nedbank Golf Challenge, ha reconocido que estar en esta posición es "fantástico", y "tener la oportunidad deganar la Race to Dubai es muy gratificante",y que le da confianza para jugar muy bien en el futuro. Esta semana espera "ganar y si no al menos batir a Rory McIlroy".
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