"He jugado más o menos desde octubre del año pasado con el hombro derecho en un no muy buen estado. Intenté descansar un poco en Navidades pero el reposo que tuve entonces no me sirvió de mucho, así que decidí poner un poco de tiempo extra a la recuperación. No ha sido una lesión grave, ni he tenido rotura de nada, simpremente había dolor y tenía que solucionarlo", asegura un Justin Rose que debutará esta semana en el circuito de la PGA después de estar casi dos meses inactivo.
"Mi objetivo inmediato es sólo seguir mejorando como jugador y seguir entrenando fuerte para estar cada vez en mejores condiciones. Mi idea es estar al cien por cien sobre el mes de abril", es decir cuando se dispute el primer Major del año, el Masters de Augusta.
Los últimos torneos de Rose, uno de los hombres que en teioría deben de estar en el mes de septiembre en Gleneagles defendiendo al equipo europeo en la Ryder Cup, fueron el Turkis Open y el DP World de noviembre pasado y el mencionado Nedbank Golf Challenge que disputó en Sudáfrica a principios del mes de diciembre donde quedó séptimo pero jugando ya con bastantes dolores.
Este jueves, Rose saldrá con Dustin Johnson y Jim Furyk en uno de los partidos estelares de esta nueva edición del Northern Trust Open.