A estas alturas de la semana, de lo que pueda pasar el domingo en el Augusta National, solo tenemos el pálpito. El de los españoles lo marca Jon Rahm y su posible victoria en el Masters Tournament. La sexta para el golf español que además llegaría en un momento dulce para el de Barrika que se convertiría en el segundo jugador vasco, el primero fue José María Olazábal, en enfundarse el mítico paño verde.
Una victoria que llegaría una semana después de su hijo Kepa. Un nacimiento que ponía en duda la participación de Rahm en el Masters, como ya avisaba el mismo a quienes pensaban apostar por él. Nacido el primogénito y sin riesgo de que tenga que retirarse si su llegada se producía con papá en Augusta, los apostantes han vuelto a darle su apoyo. Ya se sabe que los niños llegan con un pan debajo del brazo y de esa hogaza quieren pillar cacho quienes ya se están jugado los cuartos por el español. 13 euros por cada uno apostado se pagan si gana. Desde luego que no está nada mal.
En esa línea están también las ganancias que obtendrían quienes se jueguen los cuartos por Justin Thomas, mientras que menos fe se tiene depositada en la victoria de Rory McIlroy a quien levantar el trofeo en casa de Bobby Jones se le sigue atragantando. Por él se pagan 19 euros por cada euro depositado.
Quien sube en las apuestas es Jordan Spieth que ha recuperado la confianza de los suyos tras su victoria en el Valero Texas Open y son muchos los que creen en la posibilidad de verle reeditar su victoria de 2015 y eso le ha situado en el segundo puesto de los pronósticos empatado con Bryson DeChambeau y con dos euros más de beneficio que si ganara Dustin Johnson.
El vigente campeón, y defensor del título, sigue contando con el apoyo del público. Si finalmente volvemos a verle ganar el Masters, el segundo que se juega en menos de cinco meses, sus seguidores ganarían 10 euros por cada euro que ese hayan jugado. Una cantidad pequeña en relación con el resto de los cabezas de cartel pero es que Johnson es el principal favorito a un doblete que en este siglo solo ha logrado Tiger Woods, sin duda, el gran ausente de esta edición