Adam Scott no lo ha pasado nada bien. Tras cuatro años de sequía, el australiano ha vuelto a ser el jugador casi imbatible que había ganado hasta ahora 13 torneos en el PGA Tour, el último en 2016, cuando ganó el Honda Classic y el Cadillac Championship de los Campeonatos del Mundo. Ahora vuleve de nuevo a estar en lo más alto y junto a los mejores jugadores del mundo.
“Me gusta jugar con competencia, luchando por la victoria. Eso me hace ver que estoy listo para la competición y para volver a dar guerra. Ya me di cuenta en Torrey Pines, en el Farmers Insurance Open y esta semana he jugado muy bien.
"Ya jugué bien allí el año pasado donde terminé subcampeón. El campo estaba muy bien y este año volví a jugar muy bien. Me di cuenta de que estaba empezando a jugar muy bien otra vez y pensé que tendría mis oportunidades aquí, en Riviera", dijo el ganador Scott ya ganó en Riviera en 2005, cuando la lluvia acortó el torneo a 36 hoyos con desempate incluído.
“Lo más dificil de esta victoria es intentar olvidarte de los malos resultados que he tenido estos años, de tener la sensación de quye estaba oxidado y que no era muy competitivo. No se trata tanto del juego pero si de mi mente. Creo que esta semana he estado compitiendo muy bien de nuevo y me he visto con opciones de salir y jugar opara ganar y eso es importante.
"Me estoy haciendo mayor y sabes que cada vez necesitas más descanso pero también tienes que salir con hambre y con ganas de luchar. No puedo dejar que las semanas pasen sin sin que suceda nada importante. Ahora quiero seguir jugando y que las cosas sigan saliendo tan bien", comentó el australiano que jugará en México el Mexico Championship de los Camopeonatos del Mundo.