Ojalá que el próximo mes de diciembre hayamos concluido otra temporada como ésta, aunque fácil no va a ser. De los últimos tiempos desde luego y probablemente de toda la historia, este año 2017 ha sido el más triunfal del golf español con dieciséis victorias importantes en circuitos internacionales entre los que hay que contar un Masters de Augusta.
Las damas en una ocasión con la victoria de Azahara Muñoz en el Open de España femenino, y los hombres quince veces con tres victorias de Sergio García, tres de Jon Rahm, una de Cabrera Bello, una de Álvaro Quirós, otra más de Adrián Otaegui, lo mismo para Pedro Oriol, en seniors americanos y europeos Miguel Ángel Jiménez y Santiago Luna respectivamente y en el Alps Tour una para Sebastián García y dos para Adriá Arnaus. Lo dicho, conseguir esta retahíla de primeros puestos otra vez va a ser muy difícil, y más aún si tenemos en cuenta que entre ellos hay una chaqueta verde, y ya sabemos lo complicado que es ganar un Grande sea el que sea.
También es verdad que nunca como ahora hemos tenido tantas posibilidades, pues además del indiscutible Sergio, no creo que nadie dude de que Rahm se unirá a la lista de ganadores de Grandes más pronto que tarde, y yo no descartaría a Rafa Cabrera en este empeño porque, aunque esté un paso por detrás que estos dos, cualquier día da el salto y nos da una alegría a los aficionados.
Y la que parece ser la última gran noticia del año es la decisión de Tiger Woods de despedir a su entrenador, Chris Como, con el que ha aprendido a conocer lo que su cuerpo le ofrece tras la última operación de espalda y qué “swing” puede hacer para jugar y entrenar sin dolor. Según Tiger no tiene más que buenas palabras y respeto para su ex -entrenador, pero cree que lo mejor que puede hacer ahora es asumir él mismo este papel.
Por una parte me hace pensar que tal vez Tiger sabe de sobra lo que necesita y sólo él conoce su verdadero estado físico en cada momento, lo que validaría esa opción, pero por otra recuerdo la conocida frase de que “el que se defiende a sí mismo en un juicio tiene un tonto por abogado”, y me pregunto si será aplicable a este caso. Ojalá Woods tenga razón y sea capaz, por sí sólo, de volver a estar en forma y a jugar como sabe. Mientras tanto, Feliz Año Nuevo y hasta la semana que viene…
Si (
No(
