Si hay un claro favorito en esta nueva edición del PGA Championship ese es Rory McIlroy. El norirlandés buscará en Valhalla una nueva victoria en un torneo del Grand Slam y buscará cumplir esa promesa que dio antes del comienzo de la temporada en la que decía que "este año de 2014 quier ganar dos Majors para así solapar el mal 2013 que tuve donde no logré ninguno".
Además, tiene un nuevo reto ante sí que es el de mantener el primer puesto mundial en su quinto acceso al trono del golf internacional que la semana pasada cuando ganó el Bridgestone le"quito" al australiano Adam Scott que, sin duda, intentará recuperar su trono.
Este jueves McIlroy tendrá como compañeros de partido a dos pesos pesados del golf mundial como Bubba Watson, ganador este año del Masters de Augusta, y el alemán Martin Kaymer, ganador del US Open. Con ellos McIlroy formará un precioso partido en el que estarán juntos los tres ganadores de Majors de este año y, sin duda, tres de los favoritos en Valhalla a la victoria.
Con ellos estará también en ese mismo grupo de favoritos un jugador que también lo está haciendo de maravilla en los últimos torneos y que terminó segundo en el Open Championship y en el Bridgestone Invitational como Sergio García. Seguro que el castellonense cambiaría y aceptaría de muy buen grado esas dos segundas plazas a cambio de una victoria en el PGA Championship, su sexagésimo quinto torneo del Grand Slam, y una nueva oportunidad para romper ese mito de que el de Borriol no consigue ganar en uno de los torneos más importantes del mundo.
Sergio García saldrá en otro de los partidos importantes del torneo con Steve Stricker, todo un clásico de la PGA y el capitán estadounidense de la Ryder Cup, Tom Watson, que quizá haya pedido jugar con Sergio para ver de primera mano como está el castellonense y a quien se va a enfrentar este próximo mes de septiembre en Gleneagles.
Pero además de Sergio, el plantel de jugadores españoles en este cuatro y último Major de la temporada será muy importante con Miguel Ángle Jiménez, que saldrá a jugar en las dos primeras jornadas con Charl Schwartzel y Jim Furk; Pablo Larrazábal, jugará con los estadounidenses Brendon Todd y Brian Stuard mientras que Gonzalo Fernández Castaño estará encuadrado con Graham DeLaet y Gary Woodland. Rafa Cabrera Bello jugará con Jason Kokrak y Stepehn Gallacher.
Pero además de todos estos grandes protagonistas el torneo tendrá un clarísimo punto de atención en Tiger Woods si es que el ex número uno del mundo consigue jugar finalmente. Woods, que se lesionó este pasado domingo en la última jornada del Bridgestone, está en un alambre -el de la salud- y también contra la espada y la pared. Necesita jugar, y hacerlo bien si quiere entrar en la Ryder Cup pero por otro lado parece que su cuerpo ha dicho "basta".
La realidad es que con 38 años Tiger tiene más complicado ganar su décimo quinto grande y lo de los dieciocho de Jack Nicklaus parece que están casi imposibles. Casi será un milagro que este jueves esté en el partido asignado por la organización junto a Phil Mickelson y Pedraigh Harrington. Lo de ganar es otra historia. Un historia que empezará este jueves a las 7,30 de la mañana con los estadounidenses Brian Norman y Roberto Castro y el escocés Rusell Knox.
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