Sin duda el 17 de Sawgrass no ha defraudado a las expectativas que teníamos como cada año en uno de los hoyos más singulares del mundo. Como cada día de torneo desde hace muchos años, los golpes que podemos ver son para todos los gustos: buenos malos, cortos, largos, valientes, cobardes, altos, bajos...y un sin fin de posibilidades que hacen que los miles de espectadores que pueblan las gradas naturales del mejor hoyo de Pete Dye disfruten de cada impacto y de cada vuelo de las bolas.
Hoy, uno de los mejores golpes fue el de Jon Rahm, que casi no se movió de su sitio al impactar de manera perfecta y ver como su bola rozaba el "Hole in One". Al final, un birdie que mereció muy mucho la pena.