La recuperación de Tiger Woods va avanzando poco a poco. No hace mucho tiempo el ex número uno del mundo aseguraba en la Presiodent´s Cup que su prioridad era vivir sin dolor y hacer caso a los médicos. Estaba entonces practicando pequeños golpes cortos, sin forzar para nada su espalda e intentando recuperarse de su cuarta lesión de espalda.
Parece que las cosas van algo mejor y el trabajo de Tiger Woods empieza a dar resultados. Esos golpes cortos han evolucionado a golpes algo más largo y potentes y con el swing completo, algo que Tiger no hacía desde hace mucho tiempo.