El Circuito benéfico más veterano del golf nacional, el de la Fundación Síndrome de West, celebró su decimoquinta edición con un protagonista de excepción: Jon Rahm. El número 6 del mundo dedicó toda la jornada para compartir su juego y amistad con los participantes de una final que quedará para siempre en el recuerdo.
Jon Rahm compartió los 18 hoyos de su club de Larrabea con una treintena de jugadores aficionados que cumplieron su sueño de compartir partido con una gran estrella y, además, colaboraron con una buena causa. Posteriormente, el de Barrika asistió también a una entrega de premios en la que recibió el galardón al mérito golfístico que la Fundación Síndrome de West otorga a los personajes más destacados de este deporte.
En cuanto a la competición amateur, los mejores en la categoría masculina fueron Igor Garay (38) y Javier Sarmiento (37), en primera, y Carlos Valdecantos (42) y Juan Jesús Arregui(36) en segunda. Mientras, en la femenina, Fernanda Gorostiaga (37). El Orden de Mérito 2018 recayó finalmente en Alicia Rueda (57).
La Fundación Síndrome de West atiende a los niños afectados por esta dolencia, una epilepsia que les afecta antes del año de vida y les provoca retrasos madurativos de distinta gravedad. Más información: www.sindromedewest.org