Tras su lesión y retirada tras sólo 11 hoyos jugados el silencio había dejado la duda de saber como estaba y sólo sus palabras en el párking dejaban entender que la cosa no era sencilla vistas las explicaciones de Woods. Ayer en su página Web Tiger Woods reconocía varias cosas. Una primera que ese problema no venía derivado de su anterior problema y operación en la espalda, que seguirá trabajando y entrenando para volver cuanto antes y que no tiene fecha de vuelta. Su salud y su estado de forma serán las que manden.
Un comunicado que no tiene desperdicio y que refleja también la desesperación de un jugador que en los últimos años se ha visto muy marcado por los problemas físicos.
En el comunicado Tiger asegura que "Las dos últimas semanas han sido muy decepcionante para mí, sobre todo en Torrey Pines, porque no quería volver a retirarme otra vez. Pero por desgracia, últimamente las lesiones han hecho que esto suceda muy a menudo".
"Esta última lesión, asegura Tiger Woods en su comunicado, no está relacionada con mi cirugía previa -la que se hizo hace casi seis meses en la espalda-. "Sigo trabajando en la recuperación y en la terapia física diaria y me siento mejor cada día", asegura el ex número 1 del mundo.
En este momento, necesito mucho trabajo y entrenamiento y seguir pasando tiempo con las personas que son importantes para mí. Mi juego y las puntuaciones que he conseguido últimamente no son aceptables en los torneos en los que juego. Como he dicho, yo juego en un torneo para competir al más alto nivel, y cuando piense que estoy listo, volveré a jugar.
La semana que viene voy a practicar en Medallist y voy a seguir preparándome en casa para el resto del año. Me he comprometido a volver a la cima de mi juego. Me gustaría jugar el Honda Classic -es un torneo que se juega en mi ciudad natal y es importante para mí - pero no voy a estar allí a menos de que mi juego esté listo. Eso no es justo para nadie. Sin embargo, espero estar jugando de nuevo muy pronto".