El pasado 18 de diciembre se formalizaron dos contratos en virtud de los cuales la Dirección General de Tráfico gastará 2.976.105 euros en la compra de 30 nuevos radares para multar en carretera a través de paneles fijos o desde un vehículo parado, y dos radares para helicópteros con sistema de captación de imágenes MX15 con el fin de sancionar desde el aire a quienes sobrepasen los límites de velocidad.
La DGT desembolsará un total de 1.991.055 euros para la adquisición de 30 radares, que podrán usarse en paneles fijos o desde un vehículo parado, para controlar la velocidad en las carreteras españolas de 14 provincias. Cada uno de los equipos está formado por cinemómetro de tecnología láser de barrera, unidad de captación fotográfica con cámara digital de alta resolución o posicionador con dos cámaras fotográficas digitales con objetivos de gran angular, ordenador de captura y almacenamiento, flash con sincronizador, baterías y cargadores, trípode y soportes para vehículo y maletas de transporte.
El segundo contrato, se refiere al sistema de captación de imágenes MX15 en cambio estándar y dos cinemómetros para los helicópteros de la DGT. Tráfico pagará 985.050 euros a la empresa ETEL 88, S.A. para que ésta proporcione este material.
La DGT pretende recaudar el próximo año alrededor de 360,91 millones de euros en multas a conductores que quebranten las normas de circulación, lo que supone un 6,1% menos respecto a 2014 y la cifra más baja desde 2008, según el proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2015.
Estos datos no se corresponden con los facilitados por el ejecutivo en repuesta parlamentaria, en el congreso de los diputados, en la que se reconoce que la DGT ha recaudado alrededor de 500 millones desde que comenzó la legislatura del PP, en 2011, hasta Octubre de este año, es decir en un periodo de tres años, de manera que el objetivo marcado para este ejercicio es, al menos, duplicar obligatoriamente el número de multas e ingresos ya como partida fijada en los presupuestos.