Definitivamente la sensación que algo nos produce y la verdad que ese mismo algo puede esconder detrás no son siempre similares, es más, en ocasiones son contrapuestas.
Llevamos viendo a Sergio rondar la victoria muchas semanas seguidas y no
rematar nunca la jugada, lo que puede hacernos creer que no está jugando bien o
que no es el monstruo del golf que parece ser.
En realidad, nada más lejos de
la verdad y gracias a esas actuaciones tan destacadas, aunque no rematadas en
victoria, resulta que García está colocado firmemente en el tercer lugar de la
clasificación mundial solo superado por Adam Scott, segundo, y Rory McIlroy,
primero.
El final de temporada del castellonense está siendo mejorado solamente
por Billy Horschel y por el comentado Rory, aquél por las dos victorias
consecutivas en el BMW y en el Tour Championship, los dos últimos play off de
la Fedex Cup, y el norirlandés por sus dos Grandes y sus destacadas actuaciones
en el resto de los torneos que juega.
Por su parte, Sergio ha pasado todos los
cortes menos uno y ha conseguido diez puestos entre los diez primeros en
dieciséis torneos jugados en América, lo que totaliza casi cinco millones de
dólares ganados, el décimo tercer puesto en la Fedex Cup y el mencionado tercer
puesto en el ranking mundial.
Es fantástico saber que una buena parte de los
jugadores europeos del equipo Ryder que dentro de quince días se batirán con
los americanos está en una forma excelente, aunque siempre se dice, y creo que
con bastante razón, que el match play es otra cosa y que si un jugador no está
jugando bien en su actividad diaria en el juego por golpes, eso no quiere decir
que no vaya a ser competitivo en el juego por hoyos.
Así, por ejemplo, si me
dicen que Ian Poulter ha perdido dos dedos de la mano derecha en un accidente
seguiría creyendo en él para el equipo de la Ryder, porque la motivación que
siempre demuestra el británico es más que suficiente para ganar a quien se le
ponga por delante. Pero esto es adelantar acontecimientos, disfrutemos del
momento con la fantástica temporada de Sergio García y preparémonos para gozar
con una Ryder que se presenta más disputada que nunca y en la que los
americanos querrán vengarse de lo de Medinah, y no me extraña tras la mojada de
oreja que les hicieron Olazábal y su equipo...