"Quiero pero no puedo", podría ser el titular de esta crónica en un jueves de The Open Championship con uno de los ambientes más espectaculares que se recuerdan. Un hueco para ver un swing de Rahm o McIIlroy se antojaba casi una misión peligrosa, imposible abrirse paso entre la multitud que hoy abarrotó Royal Liverpool.
Muchos se quedaron con las ganas de ver el partido estelar del día. "Me duele el resultado por lo bien que le he pegado a la bola”, este jueves fue otro quiero y no puedo para Jon Rahm. 'Rahmbo' terminó la primera jornada del Open con +3, sufriendo en sus propias carnes la dureza de los bunkers, el español tuvo que jugar dos bolas hacia atrás.
“Podía haber aprovechado mejor los pares cinco con lo bien le he pegado desde el tee; hacer +1 en los pares cinco es un poco lo que me ha matao”, Rahm confía mañana en hacer una vuelta buena y volver a meterse en el torneo. “Hacer los menos golpes posibles”, afirmaba aludiendo a sus planes para la segunda jornada despidiéndose de la prensa española. Hubo dos momentos donde la ronda del español pudo tomar un rumbo diferente; el putt de dos metros fallado en el hoyo 11, tras un enorme birdie en el hoyo 10, uno de los más complicados donde Rahmbo embocó desde 10 metros, y las oportunidades perdidas en los hoyos 15 y 16.
Con Rahm en el alambre, los flashes de la primera jornada se centraron en Adrián Otaegui, sus 67 golpes fueron labrados a base de precisión, consistencia y tranquilidad. El -4 de Otaegui es también un mensaje al mundo del golf, después de cuatro semanas seguidas sin competir sancionado por el DP World Tour, con el único delito de haber jugado cuatro torneos del LIV Golf, el español no quiere entrar en polémicas y prefiere que hablen por él sus palos. Y lo hicieron, finalizando la primera jornada a un solo golpes de los líderes de esta 151 edición de The Open.
Encabezan el último major del año el amateur sudafricano Christo Lamprecht, ganador del British Amateur, el inglés Tommy Fleetwood y el argentino Emiliano Grillo, que quiso homenajear a su compatriota Roberto de Vicenzo, ganador aaquí en 1967, en el año de su centenario.
El resto de jugadores españoles
Pablo Larrazábal terminó el día con +1 (puesto 47) y sensaciones encontradas. “El día que juegue para pasar cortes, no me veréis más por aquí”. Firmó el mismo resultado que el debutante en torneos del grand slam, Nacho Elvira. El amateur José Luis Ballester terminó satisfecho con su +2, pero pensando en cambiar su estrategia y ser más agresivo mañana. “Puedo hacer una buena vuelta tal y como estoy pateanado”. Tendrán que pelar por el corte del torneo Alejandro Cañizares (+5), Jorge Campillo (+8) y Adri Arnaus (+11).