Tras la disputa de la primera prueba de estos tres torneos que componen los Play-offs de la FedEx Cup, llega al calendario la segunda cita millonaria de estos Play-offs con 15 millones de dólares en premios y con una subida sustancial en la bolsa debido a la presión que el LIV está poniendo al PGA Tour con la marcha de varios jugadores atraidos por los millones saudies.
Quizá por eso esta semana, como ya sucedió la pasada, el montante económico ha subido de 9,5 a 15. Cinco millones y medio más para hacer más atractivos estos torneos a los jugadores y que de esta manera no puedan caer en tentaciones como en la que parece que va a caer Cameron Smith, una de las ausencias más destacadas de este torneo que tras su incidente este pasado domingo y tras unos problemas en su cadera -así lo asegura su manager- no jugará esta semana reservándose para la final del circuito y quizá para su último torneo en el PGA Tour.
Si estarán en el Wilmington Country Club jugadores de enorme calidad como Collin Morikawa, Will Zalatoris -ganador la semana pasada-, Tony Finau, Matt Fitzpatrick, Rory McIlroy, que falló el corte este viernes pasado, Jon Rahm, ganador del torneo en 2020, Justin Thomas o Scottie Scheffler.
Todos ellos tendrán sus opciones, lo mismo que Patrick Cantlay, ganador del torneo el año pasado tras derrotar a Bryson DeChambeau -otro de los que se ha ido al LIV y no estará esta semana- en el sexto hoyo de desempate en un torneo en el que García -otro ausente del LIV- terminó sexto y Jon Rahm noveno.
Tras este torneo, los treinta mejores jugadores tomarán parte en la última cita de la temporada que se jugará en Atlanta con la FedEx en juego y un suculento bonus para el ganador del circuito.
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