El
joven y espigado golfista rubio ganó el torneo, pero se quedó sin uñas.
Salió en el segundo partido del día, se colocó líder en la casa club y
tuvo que esperar casi dos horas hasta que llegó el último partido para
poder cantar victoria. Y no es una manera de hablar, ya que en los
últimos partidos estaba Simon Ward, que con un extraordinario eagle en
el hoyo 17 se colocó a un solo golpe de Karlsson. Con un birdie en el
exigente hoyo 18 de El Parador habría forzado el desempate, sin embargo
finalizó con bogey y el triunfo voló a tierras nórdicas.
Karlsson
se lleva el triunfo en un torneo extraño en el Gecko, donde las
condiciones meteorológicas se convirtieron en un desagradable enemigo.
La segunda ronda tuvo que ser cancelada por la niebla, de forma que se
estableció anular la primera jornada y que el título se disputara el
último día en El Parador. No fue una decisión sencilla, pero se actuó
conforme marca el reglamento del circuito. Jugaron la última ronda los
quince mejores y empatados del primer día en Torrequebrada y El Parador.
Así
las cosas, Karlsson se impone con un vuelta de 68 golpes. A un impacto
termina el madrileño Jacobo Pastor, y a dos finalizó el citado Simon
Ward, autor de la mejor vuelta el primer día, y Gonzalo Gancedo. Con
este triunfo, el jugador sueco aspira aún a ganar la segunda parte del
Orden de Mérito del Gecko, es decir, el tramo de torneos que va desde
enero a marzo.
La
próxima cita de The Gecko Pro Tour tendrá lugar la próxima semana, del
10 al 12 de marzo, en los campos de Baviera y Añoreta Golf.
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