2013: Furyk y Campillo, hombres 59

Furyk mejoró sustancialmente su vuelta del primer día en la que firmó un +1. Trece golpes de diferencia en apenas 24 horas y en el mismo recorrido que le daban más valor a una vuelta que se convierte en el sexto 59 en la historia de la PGA, precedido por los 59 impactos que Stuart Appleby firmó también en 2010 en el Greenbrier Classic de 2010.

Furyk necesitó para lograr su gesta once birdies un eagle, un bogey y tan sólo cinco pares para firmar la mejor vuelta de su carrera profesional. Antes ya había firmado cinco tarjetas de 62 impactos, la última en el Justin Timberlake Shriners Hospitals for Children pero esta fue realmente espectacular.

"Estoy muy emocionado", aseguraba Furyk tras su segunda vuelta. Voy a tener que tranquilizarme esta noche porque estoy muy nervioso y mañana -decía- tengo que seguir trabajando. Aún tengo todo el fin de semana por delante aunque voy a disfrutar estas horas por lo menos".

Snedeker, co-lider del torneo junto a Furyk, sólo tuvo palabras de elogio con su rival. "La verdad es que después de ver la ronda de Jim -incluso con un bogey- de 59 golpes me hace sentir hasta mal con mi vuelta de 68 golpes. Me encanta ver cómo ha jugado aunque ahora mi trabajo es conseguir que todo el mundo se olvide de este 59 el domingo. Jim ha sido siempre un grandísimo jugador y va a ser muy divertido jugar con él el sábado", dijo Snedeker.

Este año la PGA ha vivido también grandes vueltas en sus torneos. Las mejores fueron las firmadas por Phil Mickelson con 60 impactos en el pasado Waste Management Phoenix Open y por Keegan Bradley en el HP Byron Nelson Championship. La de Mickelson fue en la primera ronda del torneo con -11 mientras que la de Bradley fue de -10.

Pero este año también hubo otro jugador que firmó como Furyck otro 59. Y es que Jorge Campillo tenía una nueva oportunidad de victoria en el Tour Europeo y lo hacía gracias a una tarjeta en la segunda jornada del Nelson Mandela Championship, donde firmó 59 golpes, la mítica cifra que es, además, la primera vez que se consigue en el Tour Europeo, y la segunda en el año tras la ronda de Jim Furyk en el pasado BMW Championship. Campillo afrontaba la última ronda en una prueba que se ha reducido a 54 hoyos y en donde era favorito a la victoria.

Sin embargo este 59 no será una cifra que cuente para el récord porque se colocaba bola debido a las malas condiciones del campo de Mount Edgecombe Country Club de Durban, inundado por las fuertes lluvias que obligaron a reducir la prueba a 54 hoyos. Sin embargo, Campillo, con siete birdies y dos eagles, recordará este dia, 13 de diciembre de 2013, cuando firmó esos 59 mítica cifra que nunca se había dado en el Tour Europeo, y la segunda en este año después de la conseguida por Jim Furyk en el BMW Championship.