Es curioso que estemos hablando de una semana regular para Jon Rahm cuando ha terminado, una vez más, entre los mejores de un torneo del Grand Slam, segundo empatado. Quizá sea cierto que el de Barrika debe de mejorar sus primeras vueltas en los torneos más importantes, aunque en el Masters de Augusta que ganó en el mes de abril su primera vuelta fue notable. Quizá por eso y por otras cosas más, ganó con brillantez el torneo de la Chaqueta Verde.
Seguramente, si no hubiera firmado una vuelta tan mala el primer día, Jon hubiera tenido más opciones de ganar el The Open, pero no lo sabremos nunca. En unas condiciones aceptables el de Barrika no estuvo fino, quizá más presionado de lo normal o quizá buscando abrir brecha muy pronto, las cosas no estuvieron a su favor.
Después todo fue mejora en la segunda vuelta y la tercera, la de la explosión, la del juego total con sobresaliente de tee a calle, con los hierros, en el juego corto y en el green donde Jon parecía no tener límite en el "Día del Movimiento", fue la confirmación de que si Jon Rahm juega como lo hizo el sábado no hay nadie ahora mismo que le pueda ganar.
Y hoy, este domingo de Open lluvioso, como tienen que ser las cosas según los cánones, Rahm se quedó cerca, pero no pudo reducir las diferencias con un Harman que estuvo espectacular y que aunque tuvo algunos errores en los primeros hoyos luego manejó la situación de maravilla para lograr su primera victoria en un torneo del Grand Slam, su triunfo más importante.
Jon tendrá nuevas oportunidades y si juega como lo ha estado haciendo, sobre todo a primkeros de temporada lo veremos ganar muchas veces torneos del Grand Slam. Ahora habrá que esperar al 2024 hasta el Masters de Augusta donde Jon defenderá la Chaqueta Verde e intentará el doblete. Antes citas importantes en Estados Unidos, en Europa y, por supuesto, en la Ryder Cup.
VEA LA CLASIFICACIÓN
Si (
No(
