El Crown Australian Open vivió una jornada final vibrante que coronó al danés Rasmus Neergaard-Petersen como campeón, logrando su primer título en el DP World Tour y su clasificación para el Masters y el The Open, tras una semana de gran consistencia. Con un total de -15 y una ronda final de 70 golpes, el jugador de 26 años se impuso por un solo golpe al ídolo local Cam Smith, que terminó segundo con -14. La batalla entre ambos se mantuvo abierta hasta el último hoyo, donde el danés mostró nervios de acero para salvar el par con un “up and down” impecable y un putt decisivo de diez pies, mientras que el australiano no pudo embocar su intento y cedió el triunfo. El desenlace fue el broche perfecto para una temporada en la que Neergaard-Petersen había acariciado la victoria en varias ocasiones, consolidando su progresión y asegurando además su billete para el próximo Masters de Augusta, un sueño cumplido para quien apenas lleva dos años y medio como profesional.
La jornada final no fue sencilla para el campeón. Comenzó con dos golpes de ventaja, pero un bogey temprano en el hoyo 4 y otros dos consecutivos en el 9 y 10 le dejaron por detrás de Smith, que parecía encaminado a la victoria ante su público. Sin embargo, el danés reaccionó con un espectacular birdie de larga distancia en el hoyo 12 y otro en el 13 que le devolvieron al liderato. El duelo se mantuvo igualado hasta el hoyo 17, donde ambos firmaron birdie, dejando todo abierto para el 18. Allí, la sangre fría de Neergaard-Petersen marcó la diferencia y le permitió levantar el trofeo con un golpe de ventaja.
El tercer puesto fue para el surcoreano Si Woo Kim, que cerró con -13 tras una semana muy sólida. El sudafricano Michael Hollick acabó cuarto con -12, mientras que el veterano australiano Adam Scott se quedó quinto con -11, demostrando que sigue siendo competitivo en los grandes escenarios.
En cuanto a la representación española, el gran protagonista fue José Luis Ballester, que firmó un meritorio sexto puesto con -10. Sus rondas de 69, 68, 65 y 72 confirmaron su excelente estado de forma tras la victoria lograda hace apenas dos semanas en el Asian Tour. Ballester rozó el Top-5 y se consolidó como uno de los jóvenes talentos más prometedores del golf español. Por detrás, Rafa Cabrera Bello y Rocco Repetto Taylor finalizaron con -5, mostrando regularidad aunque sin opciones de pelear por los puestos de cabeza. Sebas García terminó al par del campo, mientras que Quim Vidal cerró con +2, en un torneo que le resultó cuesta arriba.
La victoria de Neergaard-Petersen no solo supone un hito personal, sino también un mensaje claro de su capacidad para competir contra los mejores en escenarios de máxima presión. Su triunfo en Australia se convierte en el último capítulo de una temporada casi perfecta, en la que ha sumado experiencia, resultados y ahora un título de prestigio que le abre las puertas de Augusta. Para los españoles, el balance es positivo, con Ballester como gran referente y con la presencia de otros nombres que mantienen viva la bandera nacional en el circuito. El Crown Australian Open quedará en la memoria como el torneo en el que un joven danés se consagró y en el que España volvió a mostrar músculo competitivo en el golf internacional.
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