A palabras necias oídos sordos, que diría el dicho español. Eso es lo que se saca de la rueda de prensa de Tiger Woods en Royal Troon dias antes de la celebración del The Open -torneo que el estadounidense ha ganado en tres ocasiones y el escocés Colin Montgomerie en ninguna- y al que el ocho veces ganador de la Orden de Mérito Europea se refería sobre el californiano al que "aconsejo" retirarse del golf de primera línea.
Woods no ha querido contestarle en su rueda de prensa y ni siquiera ha querido tener una referencia al jugador escocés que ahora disputa los torneos en el PGA Champions Tour.
“Todos los deportistas tienen un momento para decir adiós, pero es muy difícil decirle a Tiger que es hora de irse. Obviamente, él todavía siente que puede ganar. Nosotros somos más realistas”, decía Monty en el Times en unas palabras no muy afortunadas refiriendose a uno de los jugadores claves del golf modeno y que tiene plena potestad para retirarse cuando el lo desee.
Woods, de 48 años, ha jugado sólo nueve rondas competitivas esta temporada en el PGA Tour, retirándose del Genesis Invitational en febrero durante la segunda ronda, terminando último entre los jugadores que pasaron el corte en el Masters y no pasó el corte en el PGA Championship y el US Open. Pero Woods insistió en que pueden venir días mejores.
"Jugaré mientras pueda y sienta que aún puedo ganar el evento", dijo.
Cuando se le preguntó si su creencia de que todavía puede hacerlo ha flaqueado, Woods dijo simplemente: "No". Y miró fijamente y con cara de piedra al interrogador. No hacían falta más palabras.
Woods regresa a Troon por primera vez en 20 años. Terminó en el puesto 24º en 1997 y en el 9º en 2004, pero no jugó por lesión en 2016. Woods no ha ganado el The Open desde 2006, pero dijo que siempre ha disfrutado del desafío de Troon.