Respiraron profundo. Especialmente el propio Luke Donald, y los hermanos Molinari, el alma del equipo europeo de la Ryder Cup, la columna vertebral continental que se está dejando la piel en el evento que se disputará en solo unas semanas en Roma.
Lo de Luke Donald con el joven jugador sueco Ludvig Aberg de 23 años fue un 'flechazo'. Nos remontamos a Detroit, el 1 de julio de 2023, hace poco menos de dos meses, allí durante la primera jornada del Rocket Mortgage Classic. Ludving Aberg, que había debutado como profesional solo dos semanas antes en Canadá, fue número uno de los ránkings universitarios, el sueco tiene el honor de ser el primer jugador en la historia en coseguir la tarjeta del Circuito Americano a través de la nueva estructura del PGA Tour University. Terminó el 25º en Canadá, en el puesto 24º en el Travellers Championship y llegaba a su tercer torneo del PGA Tour como profesional donde le esperaba un ilustre compañero de partido para las dos primeras rondas, Luke Donald.
El inglés ya venía avisado, la carrera de Ludving no ha sido tan explosiva como la de otras estrellas como Rahm, McIlroy, etc..., pero desde el propio PGA Tour le comparan y lo identifican como la próxima figura del golf europeo. Si bien es cierto, que a nadie interesa más que a los propios americanos que el próximo icono del viejo continente sea un 'producto' en parte, forjado por ellos. Eduardo Molinari uno de los vicecapitanes y principal estadista del golf, jugó con el sueco en Dubai y lo primero que hizo fue llamar a Donald.
No impresionó a Ludving la presencia del capitán europeo y se descolgó en Detroit con una vuelta de 65 golpes con siete birdies y un eagle que dejó boquiabierto al inglés. En su círculo cercano, Donald no dejaba de hablar de este chico impresionado por juego, especialemente el juego largo, la historia se repitió con Francesco en la República Checa y con Nicolas Colsaerts en Escocia.
Todos alucinaron en sus encuentros con Ludving. Estadisticamente es el mejor jugador no clasificado para la Ryder Cup en todo el verano y ahora mismo según los datos de Eduardo Molinari, es el mejor del mundo desde el tee de salida, estádistica importante para afrontar con garantías el campo romano.
No me cabe ninguna duda que mañana Luke Donald escogerá Ludving Aberg que formará parte del equipo junto a los ya clasificados Jon Rahm, Rory McIlroy, Robert MacIntyre, Viktor Hovland, Tyrrell Hatton y Matthew Fitzpatrick. Con lo que quedarían cinco jugadores para completar el equipo que podrían salir de estos nombres; Yannik Paul, Adrian Meronk, Victor Pérez, Tommy Fleetwood, Sepp Straka, Shane Lowry, Justin Rose.
Hasta aquí lo positivo y lo que hay detrás de la elección de Donald que no deja de ser arriesgada ya que estamos hablando que probablemente Aberg se va a convertir en el jugador más inexperto de la historia en jugar una Ryder Cup; solo ha jugado 13 toneos como profesional y no ha disputado ni un solo major en toda su vida.