Seguramente tengamos en Viktor Hovland que, finalmente, ha terminado cuarto empatado en el Old Course de St. Andrews con -14 y una última vuelta de +2 un futuro ganador del The Open.
Este año no ha podido ser, pero visto lo visto ayer, en la tercera jornada del torneo con un cara a cara espectacular con Rory McIlroy, Hovland, este chico noruego que enseguida dio el salto al mejor circuito del mundo, al PGA Tour, logrará la victoria en el Open o en otro grande muy pronto y seguramente también sea uno de los candidatos de futuro más cercano que pueda optar en no mucho tiempo a comandar el Ranking Mundial.
Su actuación en el torneo, incluida la mala vuelta del domingo, ha sido impresionante, su saber estar en el campo increible, su tecnica sobresaliente, y sus ganas de ganar y ambición incontenibles.
Hovland nos va a dar muchas alegría y puede convertirse en el mejor ejemplo, si no lo es ya de la nueva sabia del golf europeo, que va a ha hacer falta visto cojo están las cosas.
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