A nadie se le escapa lo difícil que es ganar en golf. Lo que probablemente nunca hubiera pensado Robert Streb es lo larga que iba a ser la espera para verse a si mismo fotografiado como campeón de un torneo del PGA Tour. Para su primera victoria tuvo que esperar dos años, pero para volver a levantar un trofeo han tenido que pasar seis largos años. Eso sí, entre medias, Streb ganaba un torneo del Korn Ferry Tour en 2018.
Lo más curioso, es que estos tres títulos han llegado después de jugárselo todo a una sola carta. Después de tener que disputar desempates. Además, antes de ganar el playoff del McGladrey Classic en 2015, había perdido el del Greenbrier Classic unas semanas antes. En definitiva, a Streb parece condenado a no terminar el torneo en el tiempo reglamentario.
En esta ocasión, el hoyo extra lo disputó frente a Kevin Kisner. Ambos llegaban al hoyo 72 con 263 golpes (-19) y eso obligaba a volver a salir a jugar el hoyo 18 en dos ocasiones. La primera, los dos contendientes terminaban al par, y en la segunda oportunidad Streb zanjaba el duelo con birdie.
Por su parte, Rafa Cabrera Bello subía un puesto en la clasificación general después de completar la cuarta ronda con 68 golpes. El canario firmó tres birdies y un bogey para terminar el torneo empatado en quincuagesimocuarta posición.