El estilo, ya sugerido por el Citroën C4 Cactus, busca ser aún más todocamino y confirma su filiación con el concept Citroën Aircross, presentado en Shanghai el pasado mes de abril. Sus aletas están esculpidas alrededor de las ruedas, haciéndole aún más robusto. Su parabrisas retrasado, la carrocería sobre elevada y el diámetro de sus ruedas aumentado refuerzan su personalidad. En los laterales de la carrocería, unas grandes puertas en material plástico aportan ligereza, protección y definen al vehículo. Esto se ha hecho recordando el espíritu del célebre Méhari, que tenía la misma filosofía. Por último, el habitáculo, completamente abierto, permite acceder a los asientos de la segunda fila franqueando el borde de la carrocería y apoyándose en una inserción situada en el flanco trasero.
Atrevido y orientado hacia el ocio, el Cactus M pone el ocio en el centro de la experiencia automovilística y lo convierte en auténtico “arte de vivir”. El diseño interior ilustra perfectamente esta concepción por la utilización de materiales técnicos procedentes de las actividades al aire libre. El habitáculo se puede lavar con una manguera, gracias a los evacuadores integrados en las zonas de los pies. Inspirados en el mundo del surf, sus asientos están recubiertos de tejido de neopreno coloreado que ofrece al mismo tiempo confort y estanqueidad. El Cactus M se distingue también por su modularidad, algo que ofrece sobre todo el arco del techo, que permite a los pasajeros almacenar todo su material (wakeboard, tabla de windsurf…).
Cómodo en todos los terrenos, el Cactus M ha sido creado para evadirse, explorar, y descubrir nuevos territorios. Sea cual sea la actividad, la meteorología o las condiciones de la carretera, todo ha sido pensado para aumentar la tranquilidad de los ocupantes. Sobre todos los terrenos, el Grip Control permite obtener una adherencia óptima. El Cactus M, representa también la libertad extrema gracias a la modularidad de su habitáculo, que se transforma en litera, y a su capota del techo que se puede utilizar como una tienda de campaña. Esta capota, sostenida por un innovador sistema de inflado, ofrece también protección en caso de lluvia. Y cuenta también con tecnología embarcada para el uso diario con el conjunto de equipamientos útiles del C4 Cactus (tableta táctil…).
Concebido como un vehículo abierto, pero puede también adaptarse a todo cambio meteorológico gracias a su innovadora capota. Situada en el doble fondo del maletero, se instala a mano alrededor del vehículo y se tensa gracias a un innovador sistema de inflado. Un flujo de aire, que se acciona mediante un compresor situado en la parte trasera del vehículo, permite inflar tres arcos que tensan la capota en su posición. Y gracias a su modularidad interior y a su innovadora capota, el Cactus M suprime las etapas asociadas con la logística para dar un papel más importante a la improvisación y la libertad. Así, es posible transformar el modelo en un vivac para dos personas. Gracias a un ingenioso sistema de báscula, la banqueta trasera prolonga el maletero, que se abre creando una litera para dos personas. Según las necesidades, es posible dormir al raso o protegido: la capota se prolonga como una tienda autoportante utilizando el mismo sistema de inflado. Esta tienda se despliega en la parte trasera del vehículo y permite a dos personas de 1,80m estar de pie en la parte trasera del mismo.