Ganar el Masters supone mucho más que ganar un
Grande; supone ganar en el Augusta National, un recorrido espectacular a la vez
que duro, que pone a prueba todas las capacidades de un profesional de golf:
pegada, precisión, cabeza, concentración, habilidad, además de control mental e
inspiración, tan importantes estas como las propias del golf.
El
perdón no existe en Augusta. No te permite fallar y pensar en positivo a
continuación. Es un campo que hace daño, machaca el orgullo, deja una huella dolorosa
y, sin embargo, es el reto de todo golfista.
Son
48 golfistas los que han logrado ganar en las 78 ediciones del Masters de
Augusta. El que más veces lo ha logrado sigue siendo Jack Nicklaus, 5
ediciones, y le sigue Tiger Woods empatado con Arnold Palmer (4). En el palmarés figuran los grandes
nombres de la historia del golf, entre ellos Seve Ballesteros y Chema Olazábal
(dos chaquetas verdes cada uno) y sin embargo a lo largo de esta historia
faltan nombres ilustres que nunca lo consiguieron, como Ernie Els, Greg Norman,
Lee Treviño o Davis Love III. Ganar en el Augusta National no es fácil, pero
uno de ellos, de los 98 jugadores que esta semana se batirá en duelo, se
enfundará la chaqueta verde.
¿Favoritos?
Cómo no, el número 1 del mundo, Rory McIlroy, ganador de los últimos dos
Grandes disputados pero cada Grande es un mundo diferente; le avalan sus seis
ediciones disputadas en las que sólo falló un corte, su peor puesto ha sido el
40º y el mejor 8º el año pasado.
Indudablemente
es un claro favorito a ponerse su primera chaqueta verde pero echando un
vistazo al historial del Masters muchos segundos clasificados se quitaron la
espina en la siguiente edición, así que no debemos perder de vista a los
jovencísimos Jonathan Blixt o Jordan Spieth (a punto de ganar el Shell Houston
Open en este momento, y dos semanas seguidas bajo tanta presión no es fácil
pero tampoco imposible). Y también hay que estar pendiente de otros que pueden
dar la campanada como Ricky Fowler, o el jovencísimo Brooks Koepka.
El
regreso de Tiger Woods y la que podría ser su quinta chaqueta verde supone un
atractivo más en la 79ª edición del Masters de Augusta. Hasta hace unas horas
seguía en el aire su participación pero ya ha aterrizado y confirmado su clara
intención de participar. Realmente nadie sabe en qué condiciones vuelve, y si
tras unos intentos fallidos ya está listo para competir al más alto nivel que
es lo que realmente se espera de él y lo que quiere todo el mundo.
La
nota emocionante la pondrá Ben Crenshaw, ganador de la Chaqueta Verde en dos
ocasiones (1984 y 1995) que disputará su último Masters y protagonizará la
historia entrañable de la semana.
¿Y
mis favoritos? Sin duda alguna, los españoles, Sergio García, Miguel Ángel
Jiménez y José Mª Olazábal. Y no por el hecho de que haya tres españoles y por
supuesto quiera que ganen, sino porque creo que tienen serias opciones de
triunfar.
Sergio
viene más fuerte que nunca, con más confianza y más seguro de poder enfrentarse
a Augusta con una mentalidad positiva, de ganador. Ha jugado 17 ediciones en
las que ha hecho tres top 10, siendo su mejor resultado 4º en el 2004. Y un
dato importante es que viene de fallar el corte en la última edición, una razón
de peso para sacar una espina con sabor a triunfo.
Miguel
Ángel Jiménez está arrasando, no le tiene miedo a ningún torneo que se le ponga
por delante, le planta cara a "Angustias" como un torero que entra a matar, y
si el año pasado quedó en 4ª posición, este año lo puede superar. Ha jugado 15
ediciones del Masters y ha hecho cuatro top 10, y la mejor de ellas, su cuarto
puesto del 2014.
Y
por supuesto Chema Olazábal, ganador de dos Chaquetas Verdes (1994 y 1999), que
ha disputado 26 ediciones y ha demostrado, no sólo en las dos últimas ediciones
de Masters sino en sus últimos torneos, que aún le queda guerra para rato. Y
alguna que otra alegría nos puede volver a dar.
¿Difícil?
Mucho. Pero así es el Masters de Augusta y con esa emoción lo viviremos todos,
con la esperanza de que uno de los nuestros lo vuelva a ganar.