A pocas horas de finalizar la última carrera de la temporada solo sabíamos que Ferrari tiene a los dos peores pilotos de las escuderías para las que han pilotado este año; Raikkonen siempre por detrás de Alonso y Vettel, procedente de Red Bull, al que Ricciardo le ha ganado escandalosamente la partida.
Ahora se anuncia la destitución de Marco Mattiacci y el nombramiento de Maurizio Arrivabene, como nuevo máximo responsable de la escudería. Un ejecutivo del marketing que procede de la tabacalera Phillip Morris, donde ha ocupado diversos cargos de relevancia, entre ellos la vicepresidencia de comunicación global.
Está casado con Stefania Bocchi, la jefa de prensa de Kimi Raikkonen, por lo que deducimos que al igual que Mattiacci no reúne el perfil adecuado para la dirección de un equipo de Formula 1, en el que los conocimientos de patrocinios, marketing y comunicación, por muy cualificados que sean, no cubren la complejidad de conocimientos que requiere una escudería de este nivel.
Sin embargo las palabras del presidente de la casa italiana, Sergio Marchionne, van en otro sentido: "Hemos decidido nombra a Maurizio Arrivabene porque, es este momento histórico de la 'Scuderia' y de la Fórmula 1, necesitamos una persona que conozca no solo Ferrari, sino que también lo mecanismos de gobierno y los requerimientos de este deporte", explicaba Marchionne, quien valoró la "sabiduría única" del nuevo máximo responsable del equipo.
Se trata del tercer jefe que tiene Ferrari en poco más de medio año, ya que Stefano Domenicalli abandonó el cargo en abril y fue reemplazado por Mattiacci, quien ha vivido un paso fugaz dentro de una temporada marcada por otras despedidas como las de Luca Cordero di Montezemolo o Fernando Alonso.
Esta contratación llega a menos de 24 horas después de la conclusión del Mundial 2014, en el que Ferrari ha completado una temporada decepcionante, finalizando cuarta en el campeonato de constructores y sin ganar una carrera por primera vez desde 1993.
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