Tras la primera jornada del Us Open un solo jugador ha sido capaz de vencer y convencer en el Pinehurst número dos. El alemán Martin Kaymer, el héroe de la Ryder de Medinah, o por lo menos el que embocó el putt de la victoria, parece que le ha visto las cosquillas al complicadísimo campo de Pinehurst para demontar su dificultad y dejar claro que se le puede jugar bajo par y, encima, hacerle daño.
Estas cosas no les gustan mucho a los hombres de la USGA pero que se le va ha hacer. Las "malas hierbas", como describía el rough ayer mismo Bubba Watson, que no ha estado especialmente brillante hoy, no han sido tan malas para el teutón que, además de liderar el torneo tras esta primera vuelta, ha sacado hueco y aventaja a sus rivales aunque no en muchos golpes en una distancia más psicológica que real. Veremos mañana como siguen las cosas pero si Kaymer es capaz de volver a jugar como hoy se convertirá, sin duda, en uno de los grandes favoritos a la victoria el domingo.
Con él han brillado hoy, tras estos primeros 18 hoyos, jugadores como Grame McDowell, Brendon de Jonge, Fran Quinn o Kevin Na, que igue empeñado en hacer algo grande esta semana. Los cuatro han terminado con -2 uniéndose a un reducido grupo de jugadores que han vencido a este campo peculiar que en cualquier época del año debe ser precioso y que en este Us Open está más feo y seco que nunca.
En cuanto a las decepciones, que también las ha habido en esta primera vuelta, habría que destacar las de Bubba Watson, que ha terminado con +6, sin poder superar su adversión al campo y la del inglés Lee Westwood que, con +5, se sitúa ya a diez de la cabeza y parece que, de nuevo, sin opciones de victoria, aunque queda un mundo para que termine el segundo Major de la temporada.
En cuanto a los españoles, una jornada más de decepción que otra cosa, sin ninguno jugando bajo el par del campo pero con tres de los cuatro -Larrazábal, Jiménez y García- más o menos cerca del Top-ten y con un Gonzalo que aunque descolgado y a once de la cabeza -hoy firmó seis arriba- todavía tiene que intentar meterse entre los mejores el viernes aunque lo tenga más que complicado.