Tiger Woods ha confirmado que se siente bien, que ya se ha recuperado de la lesión de espalda que le obligó a retirarse del Honda Classic, y espera poder defender el título logrado el año pasado en esta cita que reúne a los mejores jugadores del mundo.
El domingo saltó la alarma cuando Tiger se retiró por problemas de espalda, unos espamos que le hicieron parar. Sin embargo, tres días después Tiger reconoce que se siente bien, que ha sido un gesto más de prevención. "Ya no recupero como antes", ha dicho. A sus 38 años el número uno es consciente de que cada vez tiene que cuidarse más. "Soy más viejo y no me curo tan rápido como solía", asegura, y añade que "tenemos que ajustar más las cosas y prevenir como hemos hecho siempre"
Tiger llega al Blue Monster con la mirada puesta en el juego corto que ha estado practicando, y con la intención de defender el título logrado el año pasado. De momento, este año no ha brillado como se esperaba y además de retirarse en el Honda Classic, en el Farmers Insurance no pudo defender la victoria del año pasado.