Layos tiene un "olor especial"
martes 07 de septiembre de 2010, 00:00h
A la izquierda Toledo, Ciudad Imperial. A la derecha La Puebla de Montalbán, pueblo salido de las páginas del Lazarillo de Tormes y al fondo Los Montes de Toledo …., y por allí empieza a despuntar un otoño inminente.
En Layos también huele a otoño. El campo de golf empieza a cambiar, durante el verano lo ha pasado mal, una ola de calor lo ha tenido “abrasaico” y de repente recibió la visita de una riada, pero todo eso ya se ve como pasado y hay que pensar en el futuro. Elias Núñez, su gerente, no se puede estar “quetito”, palabra muy toledana, y continuamente está inventado la forma de que los jugadores de golf vayan y disfruten de su campo, que siempre lo encontramos en excelentes condiciones, y de una magnífica gastronomía. En el restaurante nos ofrecen viandas dignas del mejor estómago, preparan de un modo exquisito la caza menor, la cecina de venado y otros muchos platos.
Ahora, con la llegada de la siguiente estación, han decidido que uno de los mejores platos que pueden ofrecer a quien allí recale es un excelente cocido con todos sus “apaños” y siempre después de un gran partido de golf. Los jueves, por el módico precio de 35 euros, Layos nos da la oportunidad de jugar al golf, que durante el recorrido nos ofrezcan un picnic para que no se nos “caiga la moral” y como broche final un cocido.
Las buenas ideas de Elías van unidas a la historia de este campo como si fueran siameses, y el olor tan entrañable y familiar del cocido nace de la cocina del Restaurante Zarabanda en la Casa Club.
Golf y gastronomía, binomio perfecto, no dejen de probarlo.