Mirando a la Ryder

Hasta el 30 de agosto se puede presionar para estar en la cita más grande del año. Tras esa fecha, los cuatro mejores europeos del Ranking Mundial y los cinco mejores de la Carrera hacia Dubai tienen el pase. Además, Colin Montgomerie se reserva tres plazas elegidas por él mismo como capitán.


En cuanto a los españoles, tenemos de momento a Miguel Ángel Jiménez con la presencia casi asegurada tras sus triunfos en Dubai y en Francia. Su participación en el British, con un puesto 27, le ha reforzado en la tabla para jugar en Gales a primeros de octubre. También Álvaro Quirós está a las puertas de participar en esta Ryder. Él mismo ha dicho que el objetivo de esta temporada y su puesto 11 en el Open Británico le ha dado el empujón necesario. Una buena actuación en el Bridgestone y en el PGA de agosto le daría el impulso definitivo para su estreno en la mayor competición de golf del mundo.


La incógnita es Sergio García. Con pocas opciones para clasificarse por ránking tras una temporada muy discreta, el castellonense se agarra a las invitaciones de Colin Montgomerie. Si hace unos meses Sergio dijo en Madrid que no se veía en condiciones de jugarla, su discurso cambió la semana pasada cuando aseguró que quería estar en la Ryder, y de hecho habló con Montogomerie. Lo cierto es que su juego no invita a contar con él. Sin embargo, la Ryder es una competición muy especial y Sergio siempre ha aportado un espíritu de equipo que puede ser muy importante. 


El equipo europeo para Gales tiene claro dominio británico. Westwood, Poulter, Fisher, Casey, Donald... y los norirlandeses McIlroy y McDowell, han demostrado su buen momento y dan muchas esperanzas a los europeos. Los refuerzos de Kaymer y los Molinari le dan otro toque de juventud que puede devolver a los europeos la Ryder Cup, esperemos que con una buena presencia española.