No terminan de salir las cosas para el español Miguel Ángel JIménez que arrancó con 69 golpes (-2) puesto 15º en el último torneo de la temporada que ldiera brillantemente el nortemaericano Stewart Cink que busca dar la sopresa y presionar para hacerse con la Charles Schwab Cup. Cink (-7) ha lanzado un aviso serio desde el primer día en Phoenix. El estadounidense firmó este jueves una impecable vuelta de 64 golpes, sin cometer errores, para situarse como primer líder del Charles Schwab Cup Championship, el torneo que baja el telón a la temporada del PGA Tour Champions. Es la segunda edición consecutiva en la que Cink inaugura el campeonato desde lo más alto en el Phoenix Country Club, una prueba de su afinidad con este recorrido.
Su actuación inicial le concede un golpe de ventaja sobre Jerry Kelly (-6) y dos respecto a un nutrido grupo perseguidor en el que destaca el neozelandés Steven Alker (-5), actual número uno de la clasificación anual. Cink, que llegaba a Arizona como tercero en el ranking de la temporada, asciende provisionalmente al liderato proyectado y queda en posición de depender únicamente de sí mismo para proclamarse campeón del año. Un triunfo esta semana le otorgaría automáticamente la Charles Schwab Cup.
Entre quienes buscan frenar esa inercia aparece Miguel Ángel Jiménez (-2). Tras un arranque algo discreto para su estándar habitual. Jiménez, que lideró gran parte del año la clasificación general, necesitará ganar terreno a partir del viernes para mantener vivas sus opciones de convertirse en el primer español de la historia en ganar la Charles Schwab Cup. El margen existe, pero los errores deberán reducirse al mínimo.
En segunda posición se ha instalado Jerry Kelly (-6) después de una notable ronda de 65 golpes, adornada con siete birdies. El estadounidense, que iniciaba la semana en el puesto 18 de la clasificación anual, tiene mucho terreno por recuperar y lo está aprovechando desde el primer día.
Por su parte, Steven Alker volvió a demostrar por qué ha dominado la temporada. El neozelandés firmó un 66 (-5) sin bogeys para compartir la tercera plaza junto a Tommy Gainey, Jason Caron y Steve Flesch. Se trata de su novena vuelta de 66 golpes o mejor en Phoenix en diecisiete rondas disputadas: una auténtica demostración de química con el trazado.
Con tres jornadas todavía por disputar, la batalla por el gran trofeo del circuito sénior estadounidense promete emociones fuertes. El desenlace de la temporada está oficialmente en marcha.
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