Cierto es que Rory McIlroy buscaba en este Genesis Scottish Open confirmar su buen estado de juego y buscar, además su segunda victoria de la temporada tras un único triunfo en el circuito del PGA Tour en una temporada muy extraña donde su desgaste, sobre todo personal, parece que ha sido más de la cuenta con todo lo que se ha producido con el LIV, el PGA Tour, el DP World Tour, el posterior acuerdo hace casi un mes entre todas las facciones y un protagonismo personal que le ha salpicado quizá más de la cuenta.
Pero, independientemente de todo eso, esta semana en Escocia, en un campo muy duro y exigente y con unas condiciones metereológicas muy complicadas -sobre todo por el viento-, McIlroy ha sabido ser el más fuerte, estar muy concentrado en su trabajo y apostar por una victoria que, aunque va en contra de la tradición del The Open -solo rota por Phil Mickelson en una ocasión-, está ya en su palmares y le va a dar una fuerza extra para encarar el cuatro Major de la temporada con vitola de favorito.
Hoy McIlroy terminaba con una buena vuelta de 68 golpes, pero con una ultima parte del recorrido sobresaliente que le ha dado finalmente el triunfo firmando cuatro birdies al 11, al 14 al 17 y al 18 que le han dado el triunfo después de unos pruimeros hoyos en donde no estuvo muy brillante con cuatro bogeys y sólo dos birdies que incluso le hicieron perder el liderato.
Al final un -17 que le daba la victoria por un golpe de distancia sobre Robert Macintyre que a punto estuvo de amargarle la victoria al norirlandés. Macintyre firmaba un gran 64 y seis bajo par, con eagle en el 10 incluído que lo acercó al máximo a la victoria, pero un bogey en el 6 le quitó muchas de sus posibles oportunidades ante el número 3 del mundo y líder de la Race to Dubai que llegará a Liverpool este lunes como el principal candidato a la victoria.
La tercera plaza, empatados con diez bajo par fue para el sueco David Lingmerth, para el coreano Byeong Hun An y para el número uno del mundo, Scottie Scheffler que terminó su cuarta ronda copn una tarjeta de 70 golpes.
En cuanto a los dos españoles en juego tras el corte del fin del viernes, Jorge Campillo ha terminado cuadragésimo segundo tras subir diez posiciones y acabar con 71 golpes y diez bajo par mientras que Adri Arnaus, con una vuelta de +6 bajaba veintinueve puestos en la tabla para terminar sexagésimo octavo con +1.
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